Por el delito de violación en contra de una joven de 19 años, fue vinculado a proceso Brayan “N”, a quien el juez le impuso de manera oficiosa la prisión preventiva como medida cautelar, y concedió a la fiscalía un plazo de 4 meses para llevar a cabo las investigaciones.
La tarde del martes fue ejecutada la orden de aprehensión contra el mencionado por el delito de violación, que la tarde de este miércoles, fue vinculado a proceso por el juez Luciano Angulo Espinoza, quien encontró elementos suficientes para ejecutar esta medida.
Según la relatoría de los hechos, realizada por la ministerio público Paulina Ibarra, la víctima señala que hace un par de meses, aceptó la solicitud de amistad que le envió vía Facebook el hoy imputado, y que sostenía conversaciones esporádicas con este.
Fue hace alrededor de 3 semanas cuando el victimario, invitó a comer unos tacos a la víctima, que en esa ocasión no notó nada extraño en él, incluso se retiró de la taquería pasadas las 11:00 de la noche, por lo que sus conversaciones vía redes sociales se volvieron más recurrentes.
Sin embargo, la noche del viernes 6 de septiembre, la hoy víctima, acudió a una fiesta a la casa de unas amigas, donde en el transcurso de esta, sostuvo una intensa conversación con Brayan “N” vía Whatsapp, terminándola por invitarla a su casa.
Pasadas las 2:00 de la madrugada del sábado 7 de septiembre, la víctima le pidió a un amigo que la llevara a su casa, y una vez ahí, solicitó el servicio de taxi Didi, para acudir al domicilio del hoy victimario.
Una vez ahí, este la invitó a pasar a su cuarto con el pretexto de que en la sala de la vivienda, no contaba con refrigeración, y después de un rato de conversar, este se puso raro y grosero con ella, por lo que le dijo que se retiraría.
A eso de las 4:00 de la mañana, él le dijo, vamos a tener relaciones sexuales por las buenas o por las malas, por lo que le arrebató su teléfono celular y la forzó al coito, incluso colocándole la mano en su cuello.
Posterior a esto, la víctima comenzó a sangrar profusamente por la vagina, por lo que le pidió utilizar el baño a lo que su victimario accedió, pero le dijo posteriormente que lo limpiara.
Ella solicitó el servicio de taxi Didi para regresar a su casa, una vez que recuperó su celular, pero el victimario le ordenó que no dijera nada, e incluso se cercioró que el servicio que había pedido efectivamente fuera para su casa, con lo que quedó más tranquilo.
Una vez que tambaleante subió al taxi, según el testimonio del operador de la unidad, se soltó a llorar y le pidió que la llevara a la Procuraduría porque iba a presentar una demanda, por lo que se dirigieron a la unidad Oriente de la PGJE, mientras ella lloraba durante el trayecto y se quejaba de dolores.
El taxista notó que tenía mucha sangre en la entrepierna.
Una vez en la unidad de la PGJE, fue trasladada en ambulancia al Hospital de la Mujer, donde le detectaron un desgarre vaginal de 7 centímetros, por lo que fue necesario suturarla.