Estaba un trabajador de la compañía de Gas Kino en su casa del fraccionamiento Valle del Puebla cuando escuchó gritos amenazantes, al volver la cabeza vio a dos cholos con pistola que lo insultaban y le indicaban que lo iban a matar si no entregaba el dinero, pero como traía una pistola para protección les disparó a los asaltantes, logró matar a uno y dejar herido al otro.
El nombre del empleado se reservó para su seguridad, solo se dijo que por cuestiones de su trabajo maneja fuertes cantidades de efectivo en dicha casa ubicada en Otomíes y Sombreros.
El gasero de 57 años dijo que al llegar a su casa minutos antes de las 17:00 horas, al abrir la puerta escuchó que le gritaban groserías y uno de los dos sujetos le dijo que era un asalto.
Ambos hombres llevaban pistolas, por lo que en un descuido tomó la pistola escuadra calibre 9 milímetros que tiene para su protección y comenzó a dispararles, cayendo los dos heridos.
Agentes municipales llegaron alertados por los vecinos y encontraron a un sujeto tirado sobre su costado izquierdo en la entrada de la casa con una herida en el abdomen y otra en la cabeza; estaba otro sentado en el piso con una lesión en el brazo izquierdo y otra en el omóplato, por lo que se llamó a los paramédicos que declararon muerto al primero y se llevaron al segundo con escolta al Hospital General.
Los agentes preservaron la escena y aseguraron tres armas: Una tipo escuadra, calibre 9 milímetros negra con cachas guindas, sin tiros en el cargador; un revólver Smith & Wesson, calibre 38 Especial abastecida con seis cartuchos útiles y otro revólver gris con cachas de plástico café, calibre 6 milímetros, al parecer de postas.
Del occiso al cierre de esta edición no se conocían sus generales, solo se dijo que era de tez morena, delgado, tipo adicto; vestía playera blanca, pants azul marino, tenis azules con blanco y tiene varios tatuajes en ambos brazos con la leyenda “Fuk love”.
Presentaba impactos de arma de fuego en la cabeza del lado derecho y en el abdomen.
Agentes ministeriales llegaron al lugar para iniciar las investigaciones y levantamiento del cadáver que se envió al Semefo aún sin identificar.