El juez de control dictaminó que el detenido Eduardo “N”, seguirá en prisión preventiva justificada, después de que su defensa alegara que no existen pruebas contundentes en su presunta participación con la desaparición de José Luis Falcón Millan y Adrián Misael Díaz Mundaca.
La audiencia fue solicitada por parte de la defensa, para manifestar ante el juez que su representado ya contaba con el plazo límite de la medida cautelar de prisión preventiva (dos años), y no había pruebas suficientes que dictaminara que participió en la desaparición forzada de los dos jóvenes, buscando que pasara el proceso en libertad.
Lo solicitado fue negado por el juez encargado de la resolución del caso, por lo que Eduardo “N”, permanecerá en prisión preventiva.
Al detenido se le relaciona con haber llevado a los jóvenes al rancho “Karely” ubicado en Islas Agrarias “A”, el propietario es Ramón “N”, alias “El Chito”, mismo que está bajo proceso penal por la desaparición forzada de José Luis y Adrián Misael.
El día de los hechos Eduardo "N", acompañó a José Luis y Adrián Misael al conocido bar "El Relajo", lugar donde también se encontraría en una mesa Ramón "N", acompañado de otras personas a escasos metros de los jóvenes.
Uno de estos es que busco adquirir cocaína, por lo que cuestionó a uno de los meseros sobre quien "vendía perico", señalando a la mesa donde se encontraba Ramón "N", donde tras hablar es que se inició una discusión que luego cesó, tras hablar Eduardo con Ramón, a quien aparentemente conocía.
Cerca de una hora más tarde es que Ramón invito a la mesa a Eduardo, Adrian Misael y José Luis, donde estuvieron conviviendo hasta la hora de cerrar el antro, ya alrededor de las 03:30 horas del ya 19 de agosto.
Ramón invitó a "seguir" la fiesta en una de sus viviendas en Islas Agrarias, donde los jóvenes se movilizaron bordo de la unidad de José Luis, llegando y donde estuvieron conviviendo durante un par de horas más.
En ese momento, donde por causas aún desconocidas, ambos jóvenes son golpeados y posteriormente subidos a un vehículo llevándolos con rumbo desconocido.
El 3 de junio del 2022, las autoridades realizaron un cateo en el rancho Karely, domicilio de “El Chito”, en donde mediante un video, un hombre que estaba siendo torturado y antes de ser asesinado, confesó donde estaban enterrados los jóvenes.El cateo duró cinco días, sin embargo, no se localizaron los cuerpos de los jóvenes.