Bomberos de Mexicali vuelven a ser la diferencia entre una desgracia y una fugaz aventura que vivieron una mujer su hijo y dos amigos que provenientes de San Diego, creyeron que podrían sortear los peligros de la Laguna Salada en su camioneta en la que se dirigían al Cañón de Guadalupe, pero tomaron el camino equivocado y se quedaron embancados.
La mujer Yadira Macías de 31 años, conducía una camioneta Jeep Patriot, modelo 2017, color gris, placas 7WCY712 de California, en la que viajaban los menores Carlos Axel Díaz De León de 14 años, Mario Alberto Macías de 13 y Eduardo Valencia de 10, todos sanos y salvos. Por fortuna la señal de su teléfono celular alcanzó para que llamara al 911 y se activará el protocolo de rescate, siendo el experimentado bombero, buzo y ahora rescatista Raúl Barrera quien fue el encargado de ir a prestarles ayuda.
Con los datos del vehículo, rumbo que tomaron y tiempo que tardaron en quedar atascados, Barrera se dio una idea clara de dónde podrían estar, siendo así que a bordo de su unidad acudió al sitio y los encontró a 45 kilómetros al sur de la carretera federal 2, estaban asustados pero en buen estado. Se les prestó el auxilio y se les escoltó hasta la carretera de nueva cuenta para que retomaran el camino a casa.
Barrera dijo que a cualquiera le puede pasar y recomendó a los futuros visitantes que acudan al paradisíaco Cañón de Guadalupe, que siempre lo hagan en grupos y que utilicen cuando menos dos vehículos, además que siempre tomen el camino de en medio al entrar por el Pavarotti.