Sendos aseguramientos de droga realizaron agentes de la Policía Federal y elementos del Ejército Mexicano ambos en la carretera Mexicali-Tijuana, uno que llegó con metanfetamina al retén militar en la Laguna Salada donde capturaron al presunto y el otro a la altura del Cerro El Centinela donde se les alcanzo a dar a la fuga, el cual llevaba mariguana.
Del primer caso se detalló que agentes federales y soldados que operan en el Punto de Revisión Centinela, ubicado en el kilómetro 41+500, lograron detectar una carga de más de 10 kilos de metanfetamina que era transportada en un compartimiento oculto de un carro cuyo conductor trató de pasar inadvertido por el retén militar en remodelación del kilómetro 41 de la autopista Mexicali-Tijuana. El hallazgo se realizó al pasar el vehículo sospechoso por los rayos gama, siendo asegurado el sospechoso.
No se dio a conocer la identidad del presunto traficante, solo se informó que transportaba 10 kilos 375 gramos de la droga conocida como crystal, según lo dio a conocer la Comisión Nacional de Seguridad, indicando que estas acciones forman parte de las labores de inspección, seguridad, vigilancia y prevención del delito, que realiza la Policía Federal en el estado de Baja California.
El sospechoso declaró que se dirigía a negocios a la ciudad de Tijuana, pero como se mostró dudoso en el filtro, se le pasó a realizar una inspección más minuciosa, fue así que los policías federales encontraron bajo la alfombra de la parte trasera dos paquetes rectangulares envueltos con papel aluminio que contenían la adictiva droga.
Luego en otras acciones, pero estas en la vigilancia de la misma autopista, pero a la altura del kilómetro 014+600 en el tramo Mexicali- El Centinela, como 3.5 kilómetros al norte transitando por camino de terracería en los límites con la frontera de los Estados Unidos, los agentes detectaron un vehículo sospechoso transitando sin luces por lo que procedieron a marcarle el alto cuando eran las 05:00 horas.
Al detectar el conductor la presencia de la Policía Federal aceleró su marcha iniciándose una persecución, el chofer condujo sobre brecha de terracería y al llegar a un punto sin salida, descendió del vehículo emprendiendo la huida de infantería para perderse en la maleza y la oscuridad de la noche.
Al revisar el carro abandonado marca Volkswagen Jett, modelo 2002, en la cajuela encontraron 50 paquetes de dos kilos cada uno, aproximadamente con alrededor de 100 kilos de marihuana.
Ambas cargas de droga fueron conducidas a la Procuraduría General de la República para su investigación y proceso.