Procedente del Aeropuerto de Ciudad Obregon, Sonora, fue detenido en el Aeropuerto de la Ciudad de México, Deqing “N” un chino de 39 años, residente permanente en nuestro país, quien se disponía a abordar un vuelo comercial con destino a Tokio, Japón, donde haría conexión para dirigirse a su destino final en Guangzhou, en la región de Cantón, China, lo cual no tendría nada de malo de no ser porque sus maletas las llevaba retacadas con 417 “buches” de totoaba.
Agentes de la Policía Federal aeroportuaria al detectar el cargamento, solicitaron el apoyo de los peritos de la Profepa, que confirmaron que se trataba de vejigas natatorias de totoaba mcdonaldi, por lo que se procedió al arresto del ciudadano chino junto con sus con maletas. El pasado domingo en condiciones muy similares fue capturado otro “chinito” en ese mismo aeropuerto y procedente de la misma ciudad sonorense que traficaba con 406 vísceras ilegales.
Deging y los “buches” asegurados fueron puestos a disposición del Ministerio Público de la Federación, adscrito a la Subprocuraduría Especializada en Investigación de Delitos Federales (SEIDF), por su probable responsabilidad en el delito previsto en el artículo 420, fracción IV, del Código Penal Federal, en su hipótesis de quien ilícitamente transporte productos de una especie acuática en veda.
Según los reportes de las autoridades federales investigadoras, el kilo de esa víscera seca oscila entre los 60 y 100 mil dólares, por lo que los pescadores y traficantes de esa especie marina en veda, tiene al bordo de la extinción no solo a las totoabas, sino a la vaquita marina que habita las aguas del Mar de Cortez.