Se le cumplimentó orden de aprehensión, por el homicidio de tres personas localizadas enterradas, en un predio ubicado en la carretera al aeropuerto. Elementos de la Policía Ministerial del Estado (PME), comisionados al grupo de aprehensiones, detuvieron en el Estado Sinaloa, a un presunto integrante de la banda del “El G 1”, a quien le cumplimentaron una orden de aprehensión por homicidio calificado.
Con base a los convenios de colaboración entre las procuradurías de los estados, fue asegurado en Los Mochis, Sinaloa, MIGUEL ALBERTO CORRALES CANALES (a) El Canito, implicado en el homicidio de tres personas localizadas enterradas el 6 de diciembre del 2008, en una fosa clandestina de un predio ubicado en la carretera al aeropuerto. La orden de aprehensión en contra Corrales Canales, fue girada por el Juzgado Quinto de lo Penal, por el delito de homicidio calificado en agravio de Ricardo Fernández Gómez de 19 años, Emmanuel Fernández Arámbula 19 y Jorge Guillermo Mata Pérez de 31.
Durante la investigación realizada por los agentes de la Policía Ministerial, se estableció que el 3 de diciembre del 2008, Ricardo Fernández y Emmanuel Fernández, se toparon con la banda delictiva cuando llegaron a comer al restaurante “El Faro”, en donde también se encontraba Víctor Javier Serrano Galván (a) El G1, “El Canito” y varios sicarios más. Se estableció que el “G 1”, al ver a los jóvenes en el vehículo en el que llegaron, los confundió como agentes policíacos o gente relacionada con el narcotráfico y que eran contrarios a él, por lo que ordenó a sus acompañantes que los levantaran y los asesinaran.
De acuerdo a la declaración de varios integrantes de la banda, cumplieron la orden aun cuando antes de matarlos, se dieron cuenta de que se habían equivocado y que éstos jóvenes no tenían nada que ver en cuestiones de narcotráfico, ni pertenecían a alguna corporación. En la fosa clandestina también se localizó el cadáver de Jorge Guillermo Mata Pérez (con las mismas características de la ejecución, amarrado y con el tiro de gracia.
Una vez realizados los trámites correspondientes, agentes de la Policía Ministerial de Mexicali, trasladaron a esta capital a Miguel Alberto Corrales Canales, quien fue internado en la cárcel pública local, a disposición del juzgado que lleva el proceso legal.