Un buque que transportaba 750 toneladas de petróleo salido de Egipto y se dirigía a Malta naufragó este sábado en el golfo de Gabes, en la costa sureste de Túnez, sin embargo las autoridades aseguran que pueden evitar una contaminación de gran amplitud.
Te puede interesar: Perú anuncia acciones urgentes contra ecocidio por derrame de petróleo
La ministra de Medio Ambiente Leila Chikhaoui, entrevistada a mitad de día por la televisión nacional, afirmó que la situación estaba bajo control.
Al mismo tiempo, su ministerio anunció en un comunicado la instalación de barreras anticontaminantes alrededor de la zona del naufragio, el bombeo previsto del gasóleo y la inspección porbuzos del estado del casco del barco.
"Hay fugas mínimas que ni siquiera son visibles a simple vista (...) así que no debería haber una catástrofe en el golfo de Gabes", indicó a AFP Mohamed Karray, portavoz del tribunal de Gabes, que abrió una investigación para determinar las causas del accidente.
Para protegerse de las malas condiciones meteorológicas, el buque había solicitado entrar en las aguas territoriales tunecinas el viernes por la noche.
Cuando se encontraba a unos 7 km de la costa del golfo de Gabes, el petrolero comenzó a hundirse, según el ministerio. El agua se filtró en la sala de máquinas, subiendo hasta casi dos metros de altura.
Las autoridades tunecinas evacuaron entonces a la tripulación, compuesta por siete personas, que se encontraba a bordo del buque en peligro.
Las autoridades impulsaron rápidamente "el plan nacional de emergencia de prevención de la contaminación marina con el objetivo de controlar la situación y evitar la propagación de contaminantes", según el Ministerio de Medio Ambiente.
Al momento la tripulación está siendo interrogada para entender las razones del hundimiento del buque.