El mercado eléctrico debe abrirse a la generación de energía más noble para el medio ambiente y con mayor eficiencia y permitir mayor competencia, por eso es positivo que la Cámara de Diputados federal haya rechazado el proyecto de reforma eléctrica constitucional, afirmó Alberto Sánchez Torres.
Al acudir como invitado especial del Grupo Madrugadores de Mexicali, que preside Alejandro Sumano, el presidente de la Cámara Nacional de la Industria de la Transformación (Canacintra) de Mexicali abordó el revés legislativo que sufrió el gobierno federal al no alcanzar la mayoría calificada en la llamada “Ley Bartlett” en la que se daba preponderancia a la CFE.
Expuso que en realidad no hubo una privatización del mercado eléctrico como tal, privatizar es muy diferente a aperturar o abrir el mercado eléctrico a la red privada. “Lo que hacía la reforma de (Enrique) Peña Nieto era aperturar el mercado energético hacia la participación privada”.
“Mientras el gobierno federal o CFE no pierda la infraestructura, pues pueden ir o venir privados que cada vez generen energía más barata y más limpia, pero el control absoluto es de ellos (CFE)”, destacó.
APERTURA DEL MERCADO
El dirigente de los industriales señaló que la Comisión Federal de Electricidad (CFE) fue dividida en 7 empresas, de las cuales en solo una había apertura a los privados, que es en la generación de energía, ya que el porteo nunca lo ha perdido la empresa paraestatal, que se refiere a la conducción de la energía eléctrica. Es decir, “si el gobierno federal no pierde la infraestructura para la transmisión de electricidad, nunca perderá el control del mercado eléctrico”.
“Nosotros siempre vimos con buenos ojos que se aperturara ese mercado porque la materia prima que requiere CFE para comercializar es energía y si los privados pueden venir a invertir en plantas generadoras mucho más eficientes, mucho más nobles con el medio ambiente y que resulten en un menor costo para CFE, es un beneficio”.
Por otro lado aclaró que no hay manera de comprarle energía a una planta privada, todas se encuentran en México para generar y entregar la energía a CFE y ésta a su vez la comercializaba.
Sánchez Torres mencionó que no ven la manera de que CFE pierda la infraestructura de transmisión y distribución, eso nunca se ha visto y el ejemplo es claro en Telmex, que sí se le vendió a un privado porque este compró la infraestructura, y al ser dueño de los cables y los postes, es suyo el porteo.