Como en los últimos meses empresas desconocidas se posicionaron en un lote baldío que colinda con cientos de casas de familias de la colonia Lucio Blanco y comenzaron a rellenar con escombro, los moradores se han ido a quejar al Ayuntamiento y no les han hecho caso. Además, los propietarios de un yonke -aprovechando la falta de autoridad- extendieron su cerco hasta dar con las casas, donde colocaron peligrosamente autos junto a éstas.
Piden que ante el inminente riesgo que corren sus vidas y salud, se clausure el lote en mención como lo hicieron con el de Palaco, donde se quemaron cientos de llantas, pues ahí todos los días los yonkeros queman cobre afectando la salud de los vecinos de las colonias Lucio Blanco, Ex Ejido Xochimilco, Campanario y Camino Viejo, quienes están solicitando a las autoridades que hagan algo antes de que se termine de concretar un crimen ecológico que afectará a miles de familias. Desde hace meses camiones de volteo hacen centenares de viajes y han elevado el nivel del terreno, dejando las calles de la colonia Lucio Blanco más de 2 metros por debajo, por lo que cuando ocurran las primeras lluvias, la inundación de sus casas será inminente.
Luego los propietarios de dicho yonke recorrieron su límite y también se adueñaron de los terrenos colindantes a su negocio, dejando sin derecho de vía hacia el Poniente y peor aún, colocaron autos de fácil incendio apilados sin seguridad alguna a varios metros de altura que sobrepasan los techos de las casas, amén de la quema diaria del cableado de los autos, los cuales generan un material cancerígeno como el benceno y el PVC.