La Confederación Patronal de la República Mexicana (Coparmex) nacional busca ser un contrapeso ciudadano que trabaje formalmente en los siguientes cinco años por atacar las decisiones y la retórica del Gobierno Federal, encabezado por el presidente Andrés Manuel López Obrador.
Así lo precisó Gustavo de Hoyos Walther, presidente del centro patronal en el país, al acudir a Mexicali, junto con siete expresidentes del organismo, como parte de la gira “Construyendo México”.
“Tenemos que defender el régimen republicano… que haya una verdadera división de poderes, de pesos y contrapesos, estamos apostando en mantener una Presidencia de la República que sea acotada, no como ahora se pretende de carácter ‘neoimperial’ y absoluta”.
La cual se realiza por varias ciudades del país en esta ocasión fueron recibidos por el líder en la ciudad, Ernesto Elorduy Blackaller.
Durante su participación, dijo que el balance de los últimos 30 años, se puede concluir que sí se cuenta con un mejor país, que en esta transición que comenzó a finales de los años noventa, hasta 2018, ha permitido a México ser más democrático y con más libertades.
Sin embargo, consideró, que hoy la retórica pública es que de 2000 a 2018 es que “fue un periodo nocivo. Hoy desde el poder se pretende deliberadamente llevar a cabo un proceso de deconstrucción… de esta transición que se fue viviendo paso a paso”.
Agregó que el jueves de la semana pasada en su asamblea anual, dentro de ésta se aprobó el plan estratégico por cinco años que atacará los riesgos que han observado desde el Gobierno federal.
Justificado en el entorno, comentó, se estableció en los estatutos la defensa de los “legítimos intereses de los empresarios”, el defender la verdad y la libertad, pero también de la economía de mercado.
“No son palabras menores… porque hoy la falsedad de la información, el prejuicio y el sofismo, desde luego las pretensiones de restringir las libertades, empezando con la libertad de expresión y de disentir parecerían amenazas reales”.
Además de exigir el respeto de la ley, la vigencia del Estado de Derecho, desde la Constitución Política de México hasta reglamentos, desde la propia Presidencia de la República, dijo.
Así como la defensa de la democracia liberal, que “sustenta que la persona va por delante y que el Estado solamente tiene que existir en la medida que sea necesario para traer condiciones de prosperidad, bienestar y de seguridad”.
Reiteró la importancia de “mantener el último dique del autoritarismo, que es la plena independencia del Poder Judicial”.
