Una de las últimas publicaciones de Jeanine Huerta López en sus redes sociales, fue compartir la noticia de los homicidios de dos mujeres trans, registrados en Puebla y Jalisco.
Su publicación fue el 24 de agosto, apenas tres días después ella sería asesinada al interior de su departamento, con 22 lesiones de arma punzocortante.
Jeanine tenía muy presente la muerte. En una entrevista publicada en diciembre de 2017 en el semanario Zeta, hablaba de lo joven que mueren las mujeres trans, y lo que hacía evitar para convertirse en parte de ese terrible dato. Al final, a ella le fue arrebatada la vida a los 33 años.
“Si un hombre me tira un piropo o me invita un trago, siempre le digo de mi condición porque no quiero ser una estadística más. El promedio de una vida de una mujer transgénero es 35 años, así que vivo en un mundo del peor de los casos porque quiero llegar a viejita”, decía en la conversación que sostuvo con el citado medio.
Sin embargo, Jeanine no forma parte de la estadística, porque simplemente esa no existe. En Baja California el transfeminicidio no está tipificado en el Código Penal. Es más, la Fiscalía Estatal de Baja California (FGE) investiga la ejecución de Jeanine como feminicidio, no como el asesinato de una mujer trans.
“UN HOMBRE VESTIDO DE MUJER”
Jeanine había logrado cambiar el nombre y género en su documentación, lo que provocó que su asesinato fuera tipificado como feminicidio. No obstante, ella es un caso extraordinario, pues la gran mayoría de las mujeres transgénero en Baja California no obtienen ese beneficio, pues en el estado no hay una ley que las respalde.
La fundadora de la Unión Trans de las Californias, Tita Viveros, señaló que gran parte de los asesinatos de las mujeres trans son investigados como homicidio, sin ninguna consideración adicional por su nuevo género. “No hay registros porque el gobierno no lo permite. Ignoran la transición de la persona, porque la cuentan con el género con el que nació. Muchas quedan en el anonimato, en los reportes ponen que era un hombre vestido de mujer.
Desde ahí están violentando a la persona, a pesar de que ya falleció. Ese es otro tipo de violencia que pasa mucho”, expresó Tita Viveros.
Entre 2012 y 2018 se registraron 473 crímenes de odio, de los cuales 261 fueron contra mujeres trans, de acuerdo con la asociación “Letra S”. Eso coloca a México como el segundo país en América Latina más letal contra las personas LGBT.
“Baja California no tiene leyes que protejan a las personas trans, ni siquiera quieren tipificar el feminicidio, menos transfeminicidio. Muchas organizaciones trans a nivel nacional están pidiendo justicia porque en México son varias muchachas que han sido asesinadas, por toda esta ola que ha habido de pedir nuestros derechos”, agregó Tita Viveros.
La activista manifiesta que los hombres y mujeres transgénero, son objeto constante de agresión y discriminación, en sitios como las instituciones gubernamentales, escuelas y hasta en sus mismos hogares, donde no gozan del respaldo de sus seres queridos.
“A las mujeres trans les cuesta mucho conseguir un trabajo típico y son orilladas a hacer trabajo sexual. Es una deuda que la sociedad tiene con ellas. Muchas mujeres trans sufren, empezando porque muchas veces son rechazadas por las familias, son expulsadas de las escuelas y los trabajos no quieren admitir a personas trans y claro que tienen que buscar una forma de sobrevivir”, comentó.
INTERVIENE LA CEDHBC
La Comisión Estatal de los Derechos Humanos de Baja California (CEDHBC) abrió el folio 3470/2020 relacionado con el asesinato de Jeanine Huerta López.
En mayo de 2019, el Organismo emitió la Recomendación General 1/2019 dirigida al gobierno del estado, así como a los Ayuntamientos de Tijuana, Mexicali, Ensenada, Tecate y Playas de Rosarito, con relación a las obligaciones de todas las autoridades en la entidad para la prevención, atención, investigación, sanción y erradicación de la violencia de género, incluyendo la violencia feminicida y la reparación integral del daño.
En el noveno punto recomendatorio de este pronunciamiento, la Comisión Estatal de los Derechos Humanos solicitaba a las autoridades que los programas de protección, prevención y atención a víctimas de feminicidio deberán contemplar medidas de protección diferenciales y especializadas en niñas, mujeres mayores, mujeres lesbianas, bisexuales y transgénero.
En mayo de 2018, la Comisión Estatal de los Derechos Humanos se pronunció contra la homofobia y la transfobia, haciendo un llamado enfático a las autoridades de gobierno, así como a todos los sectores de la sociedad, a promover el cambio cultural para que a todas las personas se les respete independientemente de su orientación sexual y/o identidad de género.
De igual forma, en abril de 2019, el organismo emitió la Recomendación 5/2019 dirigida al Registro Civil del Estado, por la negativa de realizar el procedimiento relativo a la adecuación sexo-genérica del acta de nacimiento.
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