Actualmente, México ocupa el primer lugar mundial en obesidad infantil, y el segundo en obesidad en adultos, precedido solo por Estados Unidos. La ubicación geográfica de Tijuana, la hace un punto estratégico para la instalación de clínicas especializadas en cirugía bariátrica, que atienden principalmente a pacientes de los Estados Unidos y del norte del país.

Tras los procedimientos quirúrgicos usados para tratar la obesidad, viene el proceso estético, que consiste en mejorar la apariencia de la piel.

TIJUANA OCUPA LOS PRIMEROS LUGARES

El presidente del Colegio de cirujanos plásticos de Baja California, Juan Pablo Cervantes, destacó que Tijuana ocupa uno de los primeros lugares en el mundo, por número de cirugías bariátricas.

Después de la intervención para disminuir de peso, después de un año de tratamiento y mantenerse con una talla adecuada, el paciente puede acudir a consulta, para ver si califica para una cirugía estética.

“El paciente puede acudir al cirujano plástico para planear una intervención y mejorar la apariencia de la piel que quedó colgando o flácida. Se hace con un cirujano plástico certificado y que tenga el conocimiento y las instalaciones para hacer este tipo de cirugías, que pueden durar entre cuatro a ocho horas, según el paciente”, apuntó.

El especialista dijo que califican para la cirugía, aquella persona que tenga antecedentes de una cirugía bariátrica, y que haya tenido una reducción drástica en su peso.

“Esto hace que la apariencia física y la autoestima, regresen y mejoren. Es una cirugía que se tiene que hacer por etapas, es una agresión muy importante al cuerpo quitar toda la piel y cortar las áreas colgantes”, puntualizó.

Con la intervención, dijo que se mejorar la cara, párpados, cuello, brazos, espalda, pecho en hombres y mujeres, abdomen, espalda baja, entre otras áreas del cuerpo.

“Lo ideal es cuando se mantenga en un peso constante, acuden los pacientes después de seis a ocho meses, lo ideal es un año después, para que se mantenga y de esta forma se pueda someter a una cirugía plástica. Tiene mucho que ver también, el estado nutricional en que se encuentre el paciente”, explicó.

Con el “boom” de cirugías bariátricas y estéticas qué hay en la ciudad, el presidente del Colegio de cirujanos plásticos de Baja California, recomendó a la ciudadanía verificar que el especialista con el que acudan este certificado, y cuente con las herramientas y equipo necesario, para realizar una intervención con ese nivel de complejidad.

“Se supone que al hacer la reducción del estómago para impedir que se absorba como se absorbía antes la comida, se supone que el paciente no vuelve a subir de peso. Si eso sucede, quiere decir que la cirugía bariátrica no funcionó o que fue fallida. En ese caso, puede incrementar de peso y en lugar de avanzar, estamos retrocediendo”, comentó.

De igual forma, subrayó que para realizar una cirugía plástica, cuando el paciente tiene problemas de tiroides, cardiacos, diabetes o hipertensión, tiene que ser previamente evaluado para saber si es candidato para someterse a la intervención.

“En la cirugía bariátrica el enfoque es que es una cirugía metabólica, eso significa que al mejorar el aspecto del peso, también mejorara la diabetes y presión alta. Los médicos que no tienen documentación, no se meten a hacer estas cirugías porque saben de la complejidad, y si lo hacen pueden tener problemas”, expuso.

El baipás gástrico es uno de los tipos más frecuentes de cirugía bariátrica en Estados Unidos. Muchos cirujanos prefieren la cirugía de baipás gástrico debido a que, en general, conlleva menos complicaciones que otras cirugías para bajar de peso.