Debido a que le fue requerido que cumpliera con el permiso de uso de suelo y licencia de construcción y a que sus propietarios no atendieron este llamado, fue clausurado un parque acuático ubicado en la carretera Santa Isabel, el cual ha sido sujeto al escrutinio de la autoridad municipal después que murió un niño ahogado en sus instalaciones, en hechos ocurridos en junio de este año.
El ahogamiento del menor ocurrió el domingo 18 de junio de este año y desde entonces, diferentes autoridades municipales han revisado la documentación que debe de cumplir dicho establecimiento, siendo omisos sus propietarios al llamado que le hizo la Dirección de Administración Urbana, la cual requirió que tramitara su uso de suelo y de construcción, lo cual a la fecha, no ha acreditado.
Por lo anterior, inspectores de la Dirección de Administración Urbana colocaron sellos de suspensión de actividades en el inmueble, el cual permanecerá cerrado hasta que regularice los trámites solicitados por la dependencia.
Cabe recordar que el pasado 18 de junio, día en que se celebraba el día del padre, murió Joshua, de 8 años, en dicho espacio.
Ahí los guardavidas del parque acuático intentaron reanimarlo, pero al no haber tenido éxito, fue trasladado por paramédicos a las instalaciones del Hospital General, donde fue declarado sin vida de manera oficial.
Desde entonces la Fiscalía General del Estado de Baja California ha iniciado una investigación derivado de estos hechos.