Durante el verano en Mexicali, las personas de la tercera edad son un sector vulnerable, aún así muchos continúan laborando bajo el sol, tal es el caso Josefina Ayala Tamayo quien a sus 75 años continúan trabajando en el negocio de venta de frutas y verduras en los tianguis, cuenta con el apoyo de su esposo y dos trabajadores más.
Debido a las altas temperaturas redujeron sus días de trabajo a martes, jueves, viernes, sábado y domingo, esos días se debe levantar a las tres de la mañana para dejar listo el puesto e ir a la yarda a surtirse de nueva mercancía.
Aunque están bajo una sombra, agregó que la semana pasada se empezó a sentir mal de su estómago, e inclusive un cliente fue a su casa para llevarles un ventilador ya que el día estuvo muy caliente.
Continúan trabajando porque son el sustento de su hogar, además es un negocio que han mantenido por más de 50 años, dejó en claro que actualmente no tiene grandes ganancias como al principio.
Por otro lado está Salvador Díaz Pérez quien a sus 63 años de edad trabaja en el estacionamiento de un supermercado cuidando y echando “aguas” a los conductores que acuden a realizar sus compras.
Un trabajo de siete horas al días exponiéndose bajo el sol, explicó que hasta el momento no ha sufrido de insolación ya que toma mucha agua al día, procura usar gorra o trapos para cubrirse un poco de los rayos del sol.
Tanto él como su esposa trabajan para sustentar los gastos de su hogar, eso sí, dejó claro que cuentan con el apoyo de sus hijos pero desean continuar trabajando en lugar de estar en sus hogares.
Está semana la Unidad Municipal de Protección Civil de Mexicali advirtió que el sistema meteorológico de Estados Unidos prevé que se registre un alza en las temperaturas, como parte de la entrada de un sistema de alta presión, el cual ocasionará que las temperaturas lleguen hasta los 46 grados centígrados.
Otro caso más es el de Vicente López quien a sus 74 años de edad se quedó sin trabajo, hace cuatro meses vendía billetes de lotería pero la empresa en la que trabajaba cerró, quedando sin tener ingresos para sustentar su hogar, por ende empezó con la venta de aguas frías en zona Centro de la ciudad, su traslado es mediante una carreta.
Empieza a laborar a las 9:30 de la mañana y termina alrededor de las 2:30 de la tarde, expuso que al día invierte mil pesos en material y solamente de puro hielo para mantener las aguas frías hasta 150 pesos, con las pocas ventas que realiza agregó que obtiene una mínima de ganancia.
“Debo continuar trabajando para pagar la renta, mi comida y seguir comprando muebles, hasta el momento no me siento mal por lo caliente que han estado los días, tomo mucha agua” compartió.
En la colonia Pueblo Nuevo vive Lucia Carlos se dedica a limpiar calles y juntar botes de aluminio para vender, mencionó que todos los días se levanta a las cuatro o cinco de la mañana para empezar a trabajar.
“Aunque me levanto muy temprano me gana el sol, cuando siento que está muy caliente me resguardo un rato, agradezco que hay mucha gente que me dona botes de aluminio para seguir vendiendo, yo soy un remolino no me gusta estar tranquila” entre risas comentó.
Regularmente obtiene una ganancia de 200 pesos al día, se traslada a pie con una especie de carreta donde pone su material y artículos que venderá, agradeció a su hija porque siempre está en los momentos trágicos y nunca la deja sola.
Para finalizar Juan Manuel tiene tres meses viviendo en la ciudad cachanilla expuso que el calor es muy feo, trabaja como velador en una primaria, pese a que su horario es nocturno no aguanta las altas temperaturas.
“A partir de las ocho de la noche hasta las once se siente muy caliente y sofocado, no se a que se debe, tomó mucha agua y sueros para evitar que me llegue a enfermar” mencionó.
Trabaja doce horas al día, de seis de la tarde hasta las seis de la mañana del día siguiente, no cuenta con una habitación con refrigeración, debe aguantar las altas temperaturas y refrescarse con líquidos.
Es por ello que las autoridades del sector salud constantemente emiten recomendaciones a los cachanillas para evitar una insolación o golpe de calor, sin embargo muchos ciudadanos deben trabajar bajo el sol pese a las altas temperaturas.
El clima de Mexicali se caracteriza especialmente durante verano por ser muy caluroso llegando a alcanzar temperaturas arriba de los 46 grados centígrados, el pasado primero de julio del presente año la Comisión Nacional del Agua delegación Baja California registró una temperatura récord, que fue de 50.2 grados centígrados en la capital.