Sin contar con permisos oficiales ni con instalaciones certificadas operan en la entidad más de 60 sitios productores de cerveza artesanal, alertó Marco Aurelio Gámez Servín, titular de la Comisión Estatal de Protección contra Riesgos Sanitarios (Coepris).
Estas bebidas son preparadas en cocinas o cocheras domiciliarias y han sido detectadas a través de los anuncios promocionales que hacen en las redes sociales.
Recientemente la Coepris dio a conocer la destrucción de dos lotes de diferentes marcas de cerveza artesanal por haber dado positivo a la presencia de coliformes fecales, contaminación que pudo haberse dado en el proceso de envasado.
Gámez Servín indicó que hasta ahora han sido evaluadas entre el 15 y 20% de las 15 marcas artesanales disponibles en la región y legalmente establecidas pero reconoce que la principal preocupación está en las más de 60 bebidas que están produciéndose sin ningún tipo de regulación.
“Se producen en cocheras en casas, no tienen aviso de funcionamiento ni un RFC, no sabemos si la cerveza la están haciendo en un lugar donde pueda haber cualquier bacteria que puede ser peligroso”.
El funcionario estatal asegura que no se trata de una persecución contra este gremio y que estas inspecciones pueden abrir la puerta a la regulación del sector que además podría ser el primero en el país en contar con una normativa específica.
Las inspecciones hechas hasta ahora por la Cepris han sido bajo la Nom-210-SSA1-2014 que fija los parámetros de microorganismos y patógenos.
“Deberían apegarse a todas las normas en general quienes ofrecen alimentos y bebidas porque no nada más es la producción y el envasado sino todo el proceso que conlleva”.
Gámez Servín adelantó que las inspecciones van a continuar y que son necesarias por cuestiones de salud ya que la presencia de bacterias pueden derivar en problemas graves de salud.
Por su parte, la autoridad municipal debe verificar las instalaciones de estas productoras cuyos procesos implican el manejo de tanques y otras herramientas.
