Personal administrativo, de educación especial y de intendencia del sector educativo en Baja California aún se encuentran inconformes debido a la falta de transparencia en los resultados de la Convocatoria de Carrera Administrativa 2023.
Aunque ya les fue entregado el reembolso de los 2 mil pesos que el Sindicato Nacional de Trabajadores de la Educación (SNTE) les exigió por inscribirse en la convocatoria y se publicó la lista de resultados, los afectados argumentan que no cuentan con información clara sobre el proceso de selección.
María de Lourdes Cervantes Pérez, auxiliar administrativa de la primaria Rufino Tamayo, dio a conocer que de los cerca de 800 trabajadores que participaron en el curso sólo 380 aparecieron en la lista de aprobados.
Sin embargo, las autoridades no dieron a conocer los puntajes obtenidos en el curso, ni tampoco se tomó en cuenta aspectos como la antigüedad del personal, o si estos cuentan con licenciatura o maestría.
“Muchos de los que estamos aquí no salimos en la lista, no sabemos el porque, hay muchos compañeros que salieron en la lista y que nada más tienen dos años de antigüedad, siete años de antigüedad, no tienen ni la preparación pero, por oídos de aquí de los compañeros, son familiares de los secretarios generales del sindicato”
La entrevistada puntualizó que se han acercado a los representantes del SNTE, e incluso el dirigente de la Sección 02, Juan Enrique Villanueva, se comprometió a recibirlos para aclarar sus dudas, pero esto no ha ocurrido.
Esto ocurrió durante una manifestación ocurrida en las instalaciones de la Sección 02, mientras que las autoridades sindicales, al que también acudió el secretario general del SNTE, Alfonso Cepeda Salas, inauguraron un centro de diagnóstico al lado del edificio.
Aunque al principio se informó a los inconformes que los dirigentes sindicales les atenderían al finalizar el evento, una vez terminado el recorrido por las instalaciones tanto Villanueva como Cepeda Salas salieron del lugar sin recibir al personal, causando molestias dado que algunos de ellos viajaron desde Tijuana y Ensenada para hablar con ellos.