Para “El Santito Cárdenas”, Rodolfo Cárdenas Trasviña, a sus 87 años la vida le ha caminado muy rápido, como agua en una pendiente desde Navolato, Sinaloa, donde nació pero no se dedicó a arriero como la canción de su lugar de origen, sino que ha dedicado la mayor parte de su tiempo, por espacio de 66 años a la locución.
Nacido en 1931 desde los 21 años se dedicó a darle voz “al cacarizo” y su tono sacerdotal y humano invadió las ondas hertzianas, primero desde Culiacán, Sinaloa, donde residió hasta los 30 años hasta que en 1961 animado por su hermano Arnoldo Cárdenas, locutor en la XECL se vino a aclimatar y residir a Mexicali.
En los últimos años ha recibido reconocimientos de la Iglesia Católica y de la comunidad mexicalense por los 45 años del programa “De Colores” y lo dice con emoción, “el primer programa católico en toda la República en tiempos que no se permitía la difusión de ninguna religión en los medios de comunicación”.
Pero a diferencia de lo que muchos creen el apodo de “El Santito” no se le quedó por eso, sino porque hacía comerciales en vivo en los intermedios de la serie que estelarizaba Roger Moore en el papel de “Simón Templar” titulada como “El Santo” y al final del programa y del “spot” despedía a “El Santo” y él como “El Santito”.
Esto en aquellos tiempos del canal de televisión en donde uno de los técnicos de la producción al igual que el personaje le ponía a Rodolfo la aureola de luz de la santidad que representan a los ángeles y santos, hace 50 años, pero ahí nació la confusión para todos aquellos que lo identifican en “De Colores”.
POR UN RETIRO ESPIRITUAL
Dicho programa lo inició después de ir a un retiro espiritual en un espacio que la Iglesia tiene en Tecate en 1973, iniciándolo en la XED donde duró tres años y debido a que le quisieron cambiar de horario, aceptó la invitación de Manuel Hurtado de la XEMMM 940 donde le prometió que no tendrían ningún problema.
Después cuando Organización Editorial Mexicana (OEM) adquirió la estación de radio junto con la 820 se vino a esta casa editora con toda la programación y desde ahí ha seguido transmitiendo con una amplia audiencia y que le ha permitido ganarse el cariño de un sector amplio de la comunidad católica.
Su actividad evangelizadora a través de la radiodifusión ha permeado en la comunidad y ha tenido amistad y estrecho contacto con los tres obispos que ha tenido la Diócesis Católica de Mexicali, desde monseñor Manuel Pérez Gil, hasta José Ulises Macías Salcedo y el actual, José Isidro Guerrero Macías desde 1998.
“Todos hubieran querido echar raíces en Mexicali por haber bebido agua del Río Colorado”, dijo, pero la misión pastoral no da residencia permanente a estos representantes de Dios en la tierra, aun así, como el programa “De Colores” siembran raíces que quedan bien amarradas en el corazón de la feligresía.
RECONOCIMIENTOS Y AMIGOS
Cárdenas Trasviña muestra orgulloso los reconocimientos que ha recibido, uno de ellos del STIRT en el 2004 cuando cumplió 52 años de locutor y enmarcado junto con el documento emitido por la Secretaría de Comunicaciones y Obras Públicas (SCOP) del 14 de enero de 1953 que lo certifica como “Locutor de radio”.
Otro del Consejo Episcopal Latinoamericano en agosto de 1999 firmado por el obispo Jorge Enrique Jiménez Carvajal por haber cumplido el 18 de octubre de ese año el 25 aniversario del programa “su esfuerzo puede ser inspirador para muchas iniciativas que se tomen para difundir el evangelio”.
Y otro entregado por el obispo Guerrero Macías, con un micrófono y otra figura que simboliza el esfuerzo y la devoción con que “El Santito Cárdenas” ha demostrado, entre muchas anécdotas que le recuerdan como ser andante que hace amigos de espíritu y materia en el vaso comunicante de la radio.