A pesar de que la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN) declaró inválida la objeción de conciencia de los trabajadores del sector público de Salud frente al aborto, en Baja California el Secretario de Salud considera que quien no esté de acuerdo en realizarlo no será asignado a dicha tarea.
Alonso Óscar Pérez Rico consideró innecesario plantear un conflicto de este tipo por lo que considera que si se sabe que un médico no está de acuerdo en alguna práctica médica no se le pedirá que la realice.
“Cuando se tiene que hacer algún procedimiento que vaya en contra de la creencia o la voluntad de un trabajador de salud siempre habrá otro que tenga diferente punto de vista, no veo la necesidad de conflictuarse”.
Bajo la objeción de conciencia un trabajador de la salud puede rechazar la realización de alguna práctica por sus creencias pero la SCJN ha considerado que esto no puede estar por encima del derecho a la salud y la discusión se da justo después de la despenalización del aborto.
Pérez Rico dijo que se acatarán las disposiciones de la ley respecto al aborto y si es necesario sancionar a quienes no lo realicen se hará aunque insiste en que no es necesaria una discusión sobre el tema.
“No podemos decir que todos están en esa condición de objeción de conciencia, ahorita es un 50/50 en muchos de los procedimientos que están en cuestión”.
El Secretario de Salud reconoció que las modificaciones legales como la que tiene que ver con la despenalización del aborto y modificaciones a la Ley General de Salud plantean un escenario distinto para los trabajadores.
Entre 2016 y 2021 en los hospitales públicos de la entidad se han realizado 17 interrupciones de embarazo en mujeres víctimas de abuso sexual.