La reconstrucción de más del 60% de las calles de Mexicali y una inversión de más de 20 mil millones de pesos es lo que se requiere para eliminar los baches de la ciudad, informó el director de Obras Públicas del municipio, Alberto Ibarra Ojeda.
Resaltó que si bien existen múltiples factores para la aparición de baches, uno de los principales es que la estructura de muchas de las vialidades ya cumplieron su vida útil y no se les dio el mantenimiento adecuado, por lo que presentan fallas.
“Si nos falta muchísimo que reconstruir aquí en la ciudad para poder evitar estos baches, tendríamos que reconstruir casi el 60 o 70% de las calles pavimentadas de Mexicali, entonces pues una inversión muy grande que hasta ahorita, y creo que de varias administraciones para acá, no se tienen”.
Admitió que no existe el recurso suficiente en la administración municipal, ni tampoco en pasadas administraciones, para reconstruir la totalidad de vialidades que requieren de esta intervención, pues una obra de esta magnitud requeriría no sólo de renovar la infraestructura de estas vialidades, sino también las líneas de agua y drenaje.
De acuerdo a estimaciones de las autoridades, un proyecto para reconstruir todas las calles que lo necesitan requeriría una inversión mayor a los 20 mil millones de pesos, una cifra muy superior a los 4 mil 975 millones que proyecta recaudar Mexicali en su Ley de Ingresos para 2023.
“Sería posible pensar en un Mexicali sin baches sí, pero con una inversión de miles de millones de pesos que se requieren para reconstruir todas esas vialidades que necesitan urgentemente una reparación”.
Aunque existen muchas vialidades que requieren de una intervención en Mexicali, Ibarra Ojeda señaló que el principal problema se encuentra en algunas de las principales como tramos de los bulevares Lázaro Cárdenas o Venustiano Carranza, así como la calle Santiago Vidaurri o la calzada Robledo.
Por otra parte, el funcionario resaltó que muchas de las colonias que ya cumplieron más de 40 años desde su pavimentación también han comenzado a presentar problemas en sus vialidades y, sobre todo, existe una problemática importante de baches en las esquinas, donde se acumula el agua del drenaje.
“Como en esas esquinas va y se acumula toda el agua, el tráfico vehicular se empieza a socavar y se hacen los baches; es la problemática que tenemos ahí en la ciudad”, dijo.
OTRAS CAUSAS
Los charcos de agua y la humedad también fueron identificados como uno de los principales problemas para la generación de baches, opinó el presidente de la Cámara Mexicana de la Industria de Construcción (CMIC) a nivel local, Luis Gibrán Padilla Acosta.
Resaltó que el problema se da principalmente en vialidades sin alcantarillado pluvial, donde durante los días de lluvia o por fugas de agua la humedad queda estancada y termina dañando el pavimento de las vialidades.
“Si se queda algún tiempo, no sé, uno o dos días, el agua busca como penetrar en el asfalto y eso es un bache en una semana”.
Si bien admitió que otras situaciones como una base hidráulica deficiente o no utilizar el contenido de asfalto adecuado también puede derivar en la generación de baches, para el empresario el principal motivo sigue siendo la presencia de humedad.
El propio gobierno estatal, al realizar sus licitaciones para obras, incluye entre los requisitos el tipo de asfalto que se debe utilizar, el cual –según señaló el entrevistado– se define dependiendo de si la calle que se construye es una vialidad principal, secundaria y otras cuestiones.
“Puede ser una mala carpeta o una que no cumpla con los estándares, pero realmente creo que eso sería en el 3% de los baches que se puedan ocasionar por un tema de carpeta, porque el gobierno del estado está muy enfocado en tema de laboratorios, y estamos metiendo carpeta que ellos mismos están pidiendo y están revisando”.
En opinión de Padilla Acosta, se requeriría una inversión cercana a los 500 millones para hacerle frente a la necesidad de infraestructura hidráulica en Mexicali.
Para el entrevistado, la aparición de baches y el desgaste de las calles también está relacionado con una falta de mantenimiento correctivo, que podría incrementar la vida útil de las vialidades.
“Dependería de en qué condiciones está el asfalto, pero hay diversidad de productos que se usan para aumentar la vida útil; desde tres años ya les puedes dar mantenimiento a las calles, y obviamente el costo es mucho menor que volver a hacer un reencarpetado”.
Resaltó que vialidades que usualmente requieren de mucho mantenimiento, como la Colón y otras principales, podrían recibir mantenimiento constante, lo que reduciría la necesidad de hacer rehabilitaciones más profundas.