Mexicanos que han vivido por años en Estados Unidos sin documentos, están regresando por su propia voluntad a esta ciudad, con la intención de evitar ser deportados y tener una sanción de diez años, indicó la directora del Albergue Migrante Cobina, Altagracia Tamayo.
“Ahorita hay un fenómeno que muchos están saliendo sin ser deportados, porque traen la esperanza de trabajar y poder regularizarse aquí y sacar pasaporte, esa es la otra parte que estamos viendo nosotros”.
Dijo que está aumentando la cantidad de personas que llegan a esta ciudad. Antes se creía que sólo llegaban deportados, migrantes de otros países y los de tránsito, pero ahora hay otro tipo de personas que vienen, algunos se quedan en el albergue de Cobina una semana y luego rentan para traerse a su familia.
Es gente que tiene años en Estados Unidos, pero que tienen miedo que los arresten, porque les darían un castigo de diez años.
Comentó que todos los días llegan centroamericanos en el tren, alrededor de 160 personas, se trata de hondureños, salvadoreños y guatemaltecos. Ellos deciden en qué albergue quedarse.
Ya les llegó el fondo migrante, que se destina a gastos operativos, como es la renta, luz (29 mil pesos de energía eléctrica), “pero aun así no nos alcanza, porque todos vienen con necesidades”.
En el tiempo de calor muchas de las personas que llegan se van a Tijuana o Ensenada, en Cobina les ofrecen la oportunidad de encontrar un trabajo, pues están aliados con cadenas de tiendas de conveniencias.
“Nosotros los albergues tratamos de darles trabajo, de hacerlos útiles y productivos”.
Mencionó que se le acabaron los pantalones que donan a los migrantes, por lo que pidió que ropa masculina que la comunidad no se ponga la done a la asociación. Para más información pueden comunicarse al celular: 6862347444
