Para velar por la salud de los canes por el cambio de clima, se recomienda que estos siempre cuenten con el cuadro de vacunación completo, además de que se cuente con una buena higiene en el lugar donde se resguarda la mascota.
Pedro Álvarez Centeno, titular del Centro Municipal de Control Animal, apuntó que tras la llegada de la primavera, es necesario que los perros cuenten con sus vacunas y desparasitados, ya que el incremento en las temperaturas desencadena de manera indirecta ciertas enfermedades y padecimientos.
En el cambio de estación del frío al calor, es más común que se dé la rickettsiosis, también llamada Fiebre Manchada de las Montañas Rocosas, la cual se desencadena en tiempo de calor debido a que en el invierno las garrapatas se aletargan.
“En tiempo de verano es con el clima adecuado, con el calor, con el porcentaje de humedad, la garrapata prolifera más rápido pero tiene que alimentarse y se alimenta de sangre”.
Con el repunte en temperaturas también se puede presentar la Ehrlichia canis, una bacteria que actúa como el agente causal de la Ehrlichiosis, una enfermedad que afecta más comúnmente a las especies caninas lo cual causa sangrado de nariz.
“Lo que lo está provocando no es precisamente el calor, es porque hay más garrapatas, si lo mordió una y le transmitió la bacteria Ehrlichia canis y le está provocando hemorragia, o incluso la muerte”.
De igual manera se debe de vacunar contra el moquillo canino, la hepatitis, la leptospirosis, el parvovirus, la coronavirosis canina, la influenza y la bordetella, aunque esta última es más común que se presente cuando el cambio del clima es de calor al frío.
El funcionario reiteró la importancia de ser un dueño responsable, de tal forma en que los canes tengan un espacio permanente donde se puedan resguardar de las inclemencias del clima.
Puntualizó que los perros no transpiran, sino que a través del jadeo liberan el calor que sienten dentro de su cuerpo, por lo que cuando su temperatura corporal está por encima de los 39 grados centígrados y no pueden liberar el calor, el can empieza a sufrir un golpe de calor, después un choque hipovolémico, para finalizar en su muerte.
De igual manera recomendó mantener limpia el área donde vive el can, retirando sus heces, limpiar los recipientes donde come y sobre todo, mantenerlos al alcance de agua y de comida.
En caso de contar con una infestación de garrapatas, se debe de fumigar el área y mantener al can desparasitado.