Durante el último año a las arcas del Gobierno del Estado han ingresado 70 millones de pesos por el registro de automóviles de procedencia extranjera y que circulan sin placas en Baja California.
Al estilo de Anapromex u Onappafa, la administración de Jaime Bonilla Valdez empadrona estas unidades pero no las regulariza ni les da garantía ante la autoridad federal que puede decomisarlas.
JORNADAS SIMULTÁNEAS
Alejandro Velasco Paredes, titular del Instituto de Identidad Vehicular y Combate a la Contaminación (Invec) encabezó ayer tres jornadas simultáneas de registro que aclaró no son “retenes” sino módulos informativos.
“Llevamos 70 mil vehículos registrados en todo el Estado, en las últimas dos semanas tuvimos problemas con la plataforma con la que realizamos el censo pero acumulamos 10 mil pre registros más que están a la espera de concretar el trámite”.
Por cada carro irregular registrado el Gobierno del Estado cobra 1 mil pesos.
Velasco Paredes insiste en que la regularización de los denominados autos “chocolate” está cerca de concretarse por parte del Gobierno Federal y asegura que este registro sería necesario.
“Se tiene la propuesta de que los 1 mil pesos que se pagan aquí sean incluídos en el pago de la regularización”.
Agregó que el registro de estas unidades va ligado a las cuestiones de seguridad al estimar que en el 80% de los delitos que ocurren en la entidad se ven involucrados carros de procedencia extranjera.
“Es necesario que sepamos quienes son las personas que conducen estos vehículos, al registrarse obtienen un documento con el que acreditan la propiedad y pueden comprar un seguro de daños a terceros”.
El titular del Invec estimó que en Baja California podrían estar circulando hasta 700 mil vehículos sin placas ni registro oficial.