Residentes del poblado Oviedo Mota Reacomodo se manifestaron frente a las oficinas de la Comisión Federal de Electricidad (CFE) en Ciudad Guadalupe Victoria (Kilómetro 43); piden un reajuste del cobro conforme a su consumo histórico y rechazan convenios y sobre todo, que les pidan aval.
La mañana de este viernes, se realizó una manifestación encabezada por Sonia Rodríguez Hernández, quien llevó 73 de los llamados “recibos locos”, que van de los 4 mil hasta los 52 mil pesos, 70 de ellos de residentes del poblado Oviedo Mota Reacomodo y tres de Ciudad Guadalupe Victoria.
En los ventanales de la oficina se pegaron copias de los “recibos locos”, los cuales irán retirando uno a uno, conforme se vayan reajustando los cobros; además, se colocaron lonas denunciando la poca sensibilidad de la empresa paraestatal, ya que -aseguran- realiza cortes de luz.
Rodríguez Hernández manifestó que de no haber respuesta a sus demandas, están dispuestos a cerrar con candado la oficina de la CFE.
Expuso que no se trata de realizar convenios en los que exigen que se pague en un plazo establecido y que presenten un aval.
“¿Quién va a querer ser aval si todos se encuentran en la misma situación? A todos les están llegando altos cobros. ¿Quién va a responder por la persona a la que le cobran 52 mil pesos?”, cuestionó.
Lo que piden, explicó, es que se reajuste el cobro conforme a su consumo histórico, ya que no es posible que una persona que pagaba mil pesos en un mes, al próximo le cobren cuatro mil, o que una persona que tiene quemado el núcleo del tablero, le sigan cobrando si tiene cortada la luz.
Mencionó que los residentes del poblado Oviedo Mota Reacomodo manejan un perfil de Facebook que se llama Oviedo Mota “Reaco”, donde varias personas manifestaron que les estaban llegando “recibos locos”, por lo que les pidió que se les enviaran para hacer una especie de tendedero, tal y como se hace con los abusadores y deudores alimentarios.
Es así que regresó a la oficina de la CFE en un par de ocasiones y pegaba los recibos pero se los quitaban, hasta que el lunes funcionarios de la paraestatal le dijeron que iban a atender casi por caso y no en forma colectiva.
Se llegó el viernes y a ninguno de los recibos le dieron solución, por lo que ayer acudieron a manifestarse de nueva cuenta, para exigir que se reajusten los cobros, ya que no se niegan a pagar, pero que sea lo justo, expresó.
LA REACCIÓN
Por su parte, Guadalupe Reyes Gutiérrez, maestra jubilada, comentó que la encargada de la oficina de la CFE, Fernanda Martínez, acompañada de un funcionario de apellido Garibay, recibió a una comitiva de los quejosos, que aceptaron que solo habían revisado 24 casos de los 73 que les presentaron.
En el caso de la señora a la que le cobran 52 mil pesos, los funcionarios de la CFE dijeron que era correcto y que tenía que pagar el recibo, ya que de lo contrario, le seguirá subiendo el adeudo.
Estos funcionarios no aceptaron errores, dicen que cobran lo correcto y que tienen que pagar los recibos; no hay de otra, aseveró.
La actitud de estos servidores públicos les llenó de “rabia” e impotencia de no poder hacer nada, expresó, ya que se trata de gente humilde que gana 1 mil 500 pesos a la semana, y no tiene para pagar.
Por el momento, va a pensar en qué acciones van a tomar, ya que esto no se puede quedar así, por lo que pide el apoyo de la gobernadora Marina del Pilar Ávila Olmeda para que intervenga en este asunto, ya que se trata de gente vulnerable y todavía falta -al menos- un mes de calor.
Está el caso de un señor que se encuentra amputado y que sobrevive de vender comida; le llegaron 7 mil pesos de luz, no tiene para pagar, por lo que se encuentra muy preocupado porque si le cortan la luz, se le va a echar a perder la carne, expuso Reyes Gutiérrez.
Otro caso es el de José Calderón, residente del Oviedo Mota Reacomodo, a quien le llegaron 7 mil 400 pesos de luz, pero solo recibe 4 mil 100 mensuales de pensión, por lo cual no sabe cómo va a pagar.