La educación universitaria debe ir más allá del salón de clases, formar profesionistas maduros con una visión humanista, no se vale formar a gente con gran conocimiento en matemáticas si es un monstruo como persona, manifestó Miguel Ángel Zavaleta Berraza, catedrático de la Universidad de Santiago de Compostela.
Como parte de la “Cátedra Distinguida” por parte de CETYS Universidad, Zavaleta Berraza impartió una plática a maestros y estudiantes de postgrado, en cada uno de los campus que tiene esta institución, donde empezó en Ensenada, este miércoles tocó el turno a Mexicali y cerrará en Tijuana.
El catedrático español hizo un símil de la educación con las luces de los automóviles cuando se viaja en carretera, cuando se tienen baja, solamente se mira lo que está inmediatamente delante, sin embargo, cuando estas se cambian a “largas”, se puede ver más allá del camino.
“¿Yo que tengo que ser para mis estudiantes, la persona que les explica una materia o tendría que trabajar con ellos otras cosas que van más allá de las materias?, y entonces está siempre ese dilema.
Sin embargo, se deben también establecer las llamadas competencias transversales que no son de ninguna disciplina pero que marcan la formación de un estudiante universitario, es decir, que un profesional que ha pasado por la universidad, no solo se le debe notar en que sabe más de matemáticas o de biología o de física, sino que sea una persona más completa, formada, madura.
“Y este es el tipo de discusión en el que estamos siempre, ¿qué podemos hacer o qué tendríamos que hacer para que esto sea verdad?, que los estudiantes que salen de la universidad, los que egresan sean chicas y chicos más maduros que cuando entraron”.
Para esto, los estudiantes a veces salen a trabajar en contextos subdesarrollados o con problemas de determinado tipo, o se vinculan a actividades de voluntariado con distintos grupos u organizaciones de la sociedad civil o dentro de la propia universidad, o bien, participar en talleres con trabajo de grupo, con la capacidad creativa, ayudarles a resolver problemas.
Esto de alguna manera, da la formación que va más allá de las puras disciplinas o de pasar algunos exámenes, y han buscado donde pueden buscarse esas temática en la agenda 2030 de la Organización de las Naciones Unidas (ONU), en la que hay que trabajar con los grandes problemas que hay en el mundo.
“Nosotros estamos preparando profesionales, que lo que queremos es que sean profesionales del mundo, que de alguna manera puedan colaborar en el desarrollo de grandes problemas que tienen, lo que he llamado hacer una educación con luces largas”.
Lo poco que se pueda hacer en las familias, lo otro poco en los municipios, las políticas en los estados, siempre es un proceso de avance, y es muy importante que los profesionales que salgan de las instituciones, estén en condiciones de poder plantearse su profesión, como decir, bueno, frente a estos grandes problemas que tiene el mundo, yo, como profesional, ¿en qué podría aportar?
¿Qué podría mejorar yo desde el trabajo que voy a hacer en las empresas que voy a trabajar para mejorar esto, que está sucediendo en el mundo?, cuestionó.
“Un chico que sale de la universidad, y que sale siendo un machista convencido y que maltrata a las mujeres sería una contradicción para nosotros, ¿qué demonio de formación le han dado a usted que sabe muchas matemáticas, pero no sabe comportarse bien?”
Hay otras cosas que tiene la universidad que no tienen que ver precisamente con las materias, como es un grupo de teatro, en el que no aprenderá más matemáticas, pero como persona, la va a enriquecer, porque participa en una actividad que lo ayuda a estar con otro tipo de gente y hacer otro tipo de cosas.
También están los grupos deportivos, de la música, la cultura, que no tienen que ver con materias concretas pero ayudan a entender muchas problemáticas del mundo, aseveró Zavaleta Berraza.
