La Senadora Gina Andrea Cruz Blackledge, presentó un Plan de Emergencia Económica para Baja California, que busca sortear la crisis financiera global y nacional, así como los efectos adversos que arrastrará el coronavirus, y con ello, proteger los empleos que sostienen a miles de familias de esta entidad.
La también presidenta de la Comisión de Relaciones Exteriores América del Norte del Senado de la República, comentó que la caída del precio del petróleo y de los índices de precios y cotizaciones de las principales bolsas de valores del mundo, la depreciación del peso, el cierre de fronteras y además la limitación de vuelos nacionales e internacionales tendrán repercusiones importantes en la actividad económica de las empresas y de las familias, señaló la legisladora por Baja California.
Gina Cruz aseveró que la caída en el Producto Interno Bruto (PIB) nacional y la desaceleración de la actividad económica son parte de una crisis global que debe ser enfrentada con decisivas medidas en el ámbito local.
Ante la crisis mundial es indispensable adoptar una serie de medidas contra-cíclicas para el Estado de Baja California que minimicen los efectos adversos de una crisis inevitable.
Es por ello que propuso las siguientes medidas :
1. Declarar de forma inmediata el estado de emergencia económica para defender los empleos y ayudar de forma prioritaria a todos los sectores afectados.
2. Coordinarse con el Gobierno Federal para que se destinen fondos emergentes a la entidad a efecto de hacer frente a las consecuencias económicas y de salud pública de la pandemia.
3. Establecer canales de cooperación interinstitucionales y con la Cancillería para prever mecanismos de cooperación y coordinación con las autoridades de los Gobiernos de los Estados Unidos de América y de California a efecto de diseñar todas las medidas sanitarias y económicas de urgencia que sean necesarias.
4. Aplicar medidas de protección a las micro, pequeñas y medianas empresas.
5. Apoyar a los trabajadores informales con programas de capacitación y empleo temporal como apoyo a la emergencia sanitaria.
6. Diseñar un programa de créditos preferenciales para trabajadoras y trabajadores independientes ante la afectación a sus trabajos.
7. Establecer subsidios y programas para la población en situación de vulnerabilidad, a partir de un padrón único de beneficiarios, con apoyos en especie sin fines clientelares, evitando aglomeraciones y filas.
8. Ampliación del plazo para el pago de impuestos locales y condonación de impuestos para sectores específicos con mayor afectación.
9. Apoyos emergentes al sector turismo, para minimizar el cierre de puestos de trabajo.
10. Exención para las empresas y personas del cobro de servicios públicos y adopción de un sistema de ventanilla única electrónica para todos los trámites gubernamentales.
11. Moratoria legal para todas aquellas disposiciones del gobierno que impliquen nuevos impuestos y cargas fiscales a familias, personas y empresas.
12. En coordinación con las autoridades federales, supervisión estricta de los precios y los comercios para evitar la especulación, las compras de pánico y el desabasto.