Más de 200 personas han acudido ante la Comisión Estatal de Protección contra Riesgos Sanitarios (Coepris) en Mexicali para señalar a una mujer por malos resultados como consecuencia de procedimientos estéticos realizados en un domicilio particular.
Las víctimas, algunas residentes del otro lado de la frontera, también han expuesto en redes sociales sus casos exhibiendo fotografías principalmente de labios que supuestamente fueron inyectados con un producto denominado Probcel.
SUSPENDEN LOCAL
Marco Antonio Gámez Servín, titular de la Coepris en el Estado, confirmó las 200 quejas recibidas y la suspensión del sitio ubicado dentro del fraccionamiento Barcelona en donde la responsable reconoció inyectar sustancias pero en clínicas que arrendaba.
En la inspección sanitaria no se ubicaron medicamentos ni sustancias para analizar pero sí se encontraron evidencias de procedimientos quirúrgicos.
“No tiene documentación, no es médico profesional, no cuenta con cédula y hay evidencia de que hubo actos de cirugía en su casa que no es una clínica”.
Además de la aplicación de Probcel las víctimas refieren la inyección de botox y colágeno con intervenciones no solo en labios sino también en glúteos y senos.
La Coepris confirmó además que la misma mujer cuenta con una denuncia ante la Fiscalía General del Estado (FGE), acusación registrada con el Número Único de Caso 0202-2018-20126.
“Confiesa ella que sí hacía esos actos pero no en su casa sino en clínicas que rentaba pero no presenta ni título ni cédula profesional”.
Durante la tarde de ayer la dependencia recibió otras dos denuncias contra otra supuesta clínica que ofrece los mismos procedimientos con malos resultados.
Gámez Servín recomendó a la población que decida someterse a un procedimiento estético pedir comprobante de las certificaciones necesarias así como los permisos sanitarios con los que deben contar este tipo de establecimientos.
En este mismo año la Coepris suspendió otro negocio que también ofrecía tratamientos estéticos sin permisos oficiales.