Alrededor de 30 sitios de venta clandestina de bebidas alcohólicas han sido descubiertos en esta ciudad durante la contingencia de salud por el Covid-19 y tocaron su máximo auge durante la restricción en lugares permitidos.
Ernesto Reséndiz Flores, subdirector de Operación y Seguimiento del gobierno municipal, precisó que hay mucha incidencia en la generación de este tipo de lugares, los cuales proliferan más en el Valle de Mexicali.
“Hay mucha incidencia y durante la pandemia proliferan tremendamente; aquí en la ciudad hemos detectado unos 30 ‘aguajes’, en el Valle de Mexicali se han presentado muchos más”.
Indicó que al ser sitios de venta clandestina de alcohol, por lo general situados en casas habitación, aun detectados por las autoridades municipales, éstas no pueden actuar al ser una propiedad privada.
Señaló que los reglamentos municipales se modifican con cada administración, de acuerdo a las situaciones particulares que se van presentando, generando una especie de parche, que al final, imposibilita a los funcionarios públicos a tomar medidas restrictivas en estos lugares.
Por esa razón estarían solicitando el apoyo de la Fiscalía General del Estado, sin embargo, es un camino largo por recorrer.
“Hay problemas en los reglamentos que nos regulan en supervisión y permisos para la venta y almacenaje de alcohol, cada administración municipal los ha parchado de acuerdo a las situaciones que se les presentan y las modifican.
“Nosotros estamos impedidos para intervenir en un ‘aguaje’, porque, por lo general, están establecidos en casas habitación; tendríamos que ver la cuestión de la Fiscalía y la Fiscalía con los juzgados para un allanamiento, eso es lo difícil”.
Reséndiz Flores mencionó que dado el incremento de los accidentes en los que el consumo inmoderado de alcohol ha sido el común denominador y ha causado pérdidas humanas, se está trabajando en la aplicación de más medidas con los permisionarios del ramo para que apoyen a bajar estos índices.
También se exhorta a los vendedores clandestinos para que vean lo peligroso de vender bebidas embriagantes a personas que ya se encuentran alcoholizadas y pueden llegar a provocar un fatal accidente.