Por cumplir cien años, la Escuela Primaria Benemérita “Leona Vicario”, realizó un evento para celebrar el aniversario de este plantel educativo de carácter federal, en donde se reconoció a distintos egresados destacados, siendo uno de estos la primera procuradora mujer de la Procuraduría General del Estado de Baja California, Perla del Socorro Ibarra Leyva.
Ayer, la escuela que está a cargo de la maestra María Elena Magaña Granados, organizó un evento conmemorativo al centenario de la primaria ubicada en la colonia Segunda Sección, en donde se presentó una ofrenda floral al busto de la mujer que participó en el movimiento de la Independencia de México.
Entre los invitados distinguidos se encontró Ibarra Leyva, quien recuerda que cuando entró al sexto grado de primaria fue justamente cuando se abrió esta escuela a ser mixta, por lo que empezó a haber estudiantes varones, puesto que previo a 1936, la primaria solo era para niñas.
La escuela fue inaugurada el 8 de abril de 1924. En aquella época, era común que las familias de buen poder adquisitivo prefirieran inscribir a sus hijas a las escuelas del Valle Imperial, lo cual cambió por el buen prestigio que generó la primaria "Leona Vicario".
Ibarra Leyva reconoció que ver las escalinatas le generó una emoción particular, toda vez que antes las consideraba grandísimas, pero en realidad, no son tan enormes como las recordaba.
“Cuando cursé la primaria me hacía una escalinata inmensa, y pues en realidad no era tan grande; no había todas las aulas que circundan los patios de esta escuela, estaba nada más este edificio (el principal)”, expresó.
Cuando era una niña, recuerda que la planta docente se enfocó en la disciplina y en los valores, los cuales fueron una buena base para su vida personal y profesional, lo cual le permitió ser la primera mujer que trabajó como ministerio público.
Como estudiante, dijo que le gustaba bailar, por lo que se ofrecía a participar en todos los festivales.
“Me regañaban después en casa que si no había alguien más, pero a mí me encantaba participar en esos festivales, las maestras nos dedicaban mucho tiempo para enseñarnos a bailar”, mencionó.
A ella le tocó recibir clases en el sótano, donde a la fecha solo es almacén. En el recreo, recordó que las niñas jugaban voleibol.
Algunas de las compañeras de la escuela que sigue frecuentando, son Rubí Manjarrez, Bertha García Acosta, Rosa Amelia Romero, Elena Carballido, Diana Guerrero, por mencionar algunas.
“De aquí me llevo entrañables amigos, no solo compañeros de escuela, sino amigos; nos reunimos con bastante asiduidad”, expresó la también ex magistrada.