Una estrategia basada en los derechos humanos y preparación eficiente en esta materia para los elementos de la Dirección de Seguridad Pública Municipal (DSPM), es lo que se requiere para que en la localidad no se presenten abusos policiales durante este periodo de contingencia sanitaria.
Rebeca Maltos, directora de la asociación Gente Diversas, señaló que si bien nadie está preparado para reaccionar a este tipo de acontecimientos y medidas establecidas por las autoridades, como el llamado toque de queda y uso obligatorio de insumos de protección, los agentes municipales, designados para vigilar que éstas se acaten, deben de estar preparados para no abusar de sus atribuciones y provocar actos como los ocurridos en el estado de Jalisco.
El 4 de mayo, Giovanni, un hombre de 30 años, murió después de ser detenido por policías al parecer por no traer cubrebocas.
“Las medidas son muy peligrosas si no capacitas bien a los policías, la autoridad no puede implementarlas medidas sin capacitar a sus policías, no están capacitados, y ese es el desafío”.
Mencionó que la restricción de horario de circulación y el cierre de espacios públicos, puede generar confusión en la población, incluso rebeldía por parte de algunos jóvenes, a quienes los policías deben de dirigirse en apego y respeto a los derechos humanos universales, por lo debe de preparárseles en protocolos de atención.
“Muchos jóvenes pueden, a manera de rebeldía salir y burlar esa medida y producir un escenario que produzca reacciones en contra y detenciones arbitrarias que puedan caer en un hecho violatorio a los derechos humanos si no se hace bien con un protocolo”.
“No se pueden poner medidas administrativas a los policías, medidas a los que no estamos acostumbrados si o hay un protocolo y la ciudadanía debe conocer este protocolo, porque si no le vamos a dar marcha atrás a los derechos humanos y la pandemia es l mejor pretexto para hacerlo”.
