En los próximos días, por la garita Mexicali-Calexico el Gobierno de Estados Unidos comenzará a devolver a territorio mexicano a migrantes centroamericanos que cruzaron ilegalmente la frontera para pedir asilo y esperar acá la resolución de su caso.
La medida se viene aplicando desde enero pasado y era exclusiva por las garitas de Tijuana, sin embargo se determinó necesario usar otros puertos para la devolución de los extranjeros, medida que el Gobierno federal consideró unilateral.
El anuncio causa preocupación entre las autoridades estatales y especialmente en las organizaciones de la sociedad civil que no se dan abasto con la llegada de las caravanas de centroamericanos además del flujo de migrantes mexicanos.
Gustavo Magallanes Cortés, titular de la dirección de Atención al Migrante en el Estado, indicó se trata de migrantes que demandarán atención, mientras esperan la resolución de la solicitud de asilo hecha ante Estados Unidos.
Los van a devolver para que terminen su proceso migratorio en territorio mexicalense y en algún lugar tienen que descansar, dormir y comer, para todo eso se requieren recursos.
El Gobierno federal eliminó los fondos económicos destinados a atender a la población migrante, situación que tiene en crisis a los albergues.
El Gobierno del Estado no cuenta con los recursos, ha hecho un esfuerzo extraordinario para atender hasta el momento a los que han llegado y esto viene a agravar aún más la situación.
El retorno de extranjeros a México por parte de Estados Unidos no está previsto en el acuerdo de deportación celebrado entre ambos países.