Ante el anuncio de que se reubicará el centro de transferencia de basura, el cual a la fecha se encuentra al lado de la Laguna Xochimilco, la activista ambiental Myriam Serra Castellanos, consideró que es positivo que se analice dicho cambio, proceso en el cual debe de transparentarse el proyecto técnico para el nuevo centro donde se administrarán los residuos sólidos urbanos.
La presidenta de la Fundación Hélice, manifestó que dicho proyecto se debe de analizar con mucho cuidado, el cual admitió que no se ha se le ha informado como asociación civil integrante del Comité de Protección al Ambiente del Estado.
La agrupación se ha informado sobre cuánto podría costar un estudio técnico para el procedimiento de licitación del proyecto ejecutivo del centro de transferencia, podría rondar los 7 millones 210 mil pesos, además del Impuesto al Valor Agregado, de acuerdo con expertos en la gestión de residuos, avalados por la Asociación Internacional de Residuos Sólidos (ISWA) por sus siglas en inglés.
El asunto no es solo local, dijo, toda vez que implica el involucramiento de dependencias federales y estatales ambientales, en donde deben de conocer todo sobre el proyecto técnico a cumplir y sobre todo de la logística que va a considerar en el traslado de los residuos que se recolectan dos veces por semana a través de la Dirección de Servicios Públicos.
“No es un proyecto que se puede hacer a vapor y no tiene que hacerse tampoco a dedazo, es algo que debe de transparentarse para evitar que existan fricciones, tanto en términos sociales y en comunicación”, manifestó.
La ambientalista consideró que es necesario ser muy transparente al momento de que se determine el proyecto en mención, el cual debe de velar no sólo por los temas administrativos de uso de suelo, sino también de viabilidad y de sustentabilidad del mismo.
“Es un proyecto integral y es una parte del proceso de la gestión del residuo, al final, entonces, si no tenemos cuidado en lo que se va a colocar y cómo se va a colocar, como centro de transferencia, en el futuro podría ser un pasivo y un problema, económico para los ciudadanos, porque no alcanzará el recurso, se consumirá más diésel y los tiempos y movimientos no darán con el estudio”, añadió.
El nuevo centro también debe de buscar que se aprovechen y recuperen más residuos de lo que actualmente se recupera, que es mínimo.
En América Latina, dijo que se estima que solo el 30% de los residuos generados por la población son recuperados por empresas que se especializan en dicha materia.