Con la prohibición a partir del 1 de abril del glifosato, se podría desaparecer el cultivo del algodón en el Valle de Mexicali, ya que en el mercado no hay un producto que sustituya al poderoso herbicida, manifestó el consultor agropecuario, Guadalupe Villalobos.
En 2020, el presidente Andrés Manuel dijo que ningún programa de gobierno utilizará el glifosato, además solicitó que el uso de este herbicida se redujera gradualmente en los próximos 4 años, y pidió a Conacyt que trabajara en un sustituto.
Es así que el 31 de diciembre del 2020 se publicó en el Diario Oficial de la Federación el decreto por el cual se establecen las acciones para sustituir gradualmente el herbicida llamado glifosato y los agroquímicos que contengan este como ingrediente activo, por alternativas que no dañen a la salud humana y el medio ambiente.
Al respecto, hace unos días, los senadores por Morena, Nancy Sánchez y Fernando Espino propusieron que el Senado de la República solicite al presidente López Obrador que amplíe el plazo para la prohibición del uso, adquisición e importación del glifosato, que vence el 31 de marzo.
Villalobos comentó que el glifosato se utiliza para acabar con la maleza que crece entre los cultivos como el algodón y el maíz, y hasta el momento no hay en el mercado, una alternativa viable para sustituirlo.
Al retirar el glifosato se desaparece el cultivo del algodón, ya que la semilla transgénica funciona mejor con el glifosato.
Recordó que hace unos años, el presidente López Obrador, pidió a los integrantes del Consejo Nacional Agropecuario que en lugar de utilizar glifosato, mejor quitaran la maleza de sus cultivos como se hacía anteriormente, a machete, y así contratar más mano de obra.
Regularmente quien está detrás de este tipo de movimientos es la organización internacional Greenpeace, sin embargo, estos no intervienen en Estados Unidos.
El glifosato sí fue sancionado, pero no porque se haya comprobado que provoca cáncer, sino que la multa fue porque no pusieron una etiqueta en la que advirtieran a las personas con antecedentes de cáncer de linfomas, que no utilicen el glifosato.
“La mayor parte de la gente que primero demandó a Monsanto, luego a Bayer, son jardineros, o sea, no son agricultores que se hayan enfermado por aplicar el glifosato”.
El presidente habla de no utilizar maíz transgénico, sin embargo, México va a importar 18 millones de toneladas de maíz amarillo, todo es transgénico.
En el caso del algodón, la variedad transgénica era soportar la presencia de todos los gusanos que le aparezcan, luego se desarrolla una semilla de algodón que además de acabar con los gusanos, soporta la presencia del glifosato, que mata a todas las yerbas que crecen alrededor y que compiten a la planta por el agua.
Villalobos mencionó que en Mexicali hay mucha presencia de una maleza que le llaman “correvuela”, pero al sembrar semilla de algodón transgénico, con una dosis de glifosato, la maleza desaparece por completo en 3 años, y la tierra sigue produciendo.