Es poco el alcance que se tiene en la Secretaría de Inclusión Social e Igualdad de Género de Baja California para brindar atención a víctimas, derivado del poco personal, manifestó Rebeca Vega Arriola, titular de la dependencia.
Durante el desahogo de la comparecencia del tercer informe de actividades, indicó que para ello, cuentan con redes de atención cuando llegan víctimas de violencia de género a la secretaría con el fin de que se agilice la atención y que haya acompañamiento para no revictimizarlas.
Precisó que a través de la jefatura de atención de la violencia es como atienden a las mujeres víctimas de algún tipo de violencia, en dónde se ha encontrado que las zonas con mayor incidencia son los llamados "Pueblas", el Valle de Mexicali y San Quintín.
"En este municipio es donde sucedió el feminicidio que derivó en la solicitud de la alerta de violencia de género contra las mujeres en el estado", agregó.
En ese sentido, indicó que la dependencia tiene un recurso de 5 millones de pesos para apoyos sociales, sin embargo, no cuentan con reglas de operación para ejercer el recurso.
"Estamos a la espera que nos validen las reglas de operación ha sido un trabajo complejo pero vamos avanzando", expresó.
Rebeca Vega, informó que lo que se prioriza es atender a las personas que detectan dentro de los grupos prioritarios, que son las personas de la diversidad LGBTQ+, mujeres, personas en situación de calle, comunidades indígenas en dónde hay modalidades de apoyo.
"Estamos haciendo un ejercicio para poder atender de manera equilibrada a todos los grupos, pero tenemos planeado que para el siguiente año este recurso sea por medio de programas específicos para determinados grupos como la tarjeta violeta", aclaró.
Lo anterior debido, a que ha sido complicado tener establecidas las reglas de operación del recurso por lo cual es necesario tener mecanismos más regularizados para tener programas de apoyo fijos.
"La gran complejidad es que no son apoyos sociales, son medidas de nivelación a los grupos de atención prioritaria para poder acortar esa brecha de desigualdad histórica en la que han sido inmersos y que de manera regular no pueden acceder a algún apoyo".
Declaró que dichos apoyos van dirigidos por ejemplo a mujeres trans, personas de comunidades indígenas alejadas, personas en situación de calle que no cuentan con documentos entre otros.
Así mismo, externó que no cuentan con un mecanismos específico para llegar a a colectivos de atención prioritaria, sin embargo, la secretaría tiene las puertas abiertas para brindarles la atención.
"Hemos ayudado a la Casita de Unión Trans, Cobina, hemos trabajado con diversos actores de Tijuana, en Ensenada, pero necesitamos armar un mecanismos para poder convocar a estos organismos a mesas de trabajo", detalló.
Por último, la funcionaria resaltó que es necesario seguir creando estrategias para poder colaborar con la sociedad civil así como con la iniciativa pública y privada.