La clave para no perder el ingreso del aguinaldo es priorizar las necesidades y separarlas de aquello que solo es un “gusto” que no representa un verdadero beneficio que repercuta en el largo plazo.

El entrenador financiero, Miguel Vidales recomendó que del total que se ingrese por esta prestación, se separe el 30 por ciento y de ahí recomendó separar en tres partes iguales dicho dinero.

El primero debe de categorizarse como el "cochinito" para el ahorro, siendo este el que debe utilizarse en caso de emergencias, es decir, de situaciones importantes no previstas.

El segundo cochinito debe ser para las inversiones, lo cual incluso podría generarles más dinero; y finalmente el del tercer “cochinito” es para aquello que es para la caridad o diezmo.

Del 70% restante del aguinaldo, recomendó que un 30% se destine para las deudas, como lo puede ser el pago de tarjetas de crédito o impuestos, un 20% a remodelaciones del hogar, como lo puede ser la adquisición de muebles nuevos o bien, dar mantenimiento a las instalaciones.

“Incluso un mueble viejo, aunque ya no lo quieras, se puede vender aunque sea a un bajo costo, que incluso puede servir para comprar el nuevo mueble”.

Recomendó que otro 10% del aguinaldo se destine para compras personales, como lo puede ser adquirir un perfume nuevo, ropa y finalmente otro 10% puede destinarse a diversión o entretenimiento, como lo pueden ser las posadas o vacaciones a futuro.

El experto en finanzas personales reiteró que a pesar de recibir el aguinaldo, cada vez que la persona reciba su sueldo se debe de ahorrar el 10% para depositarlo en la alcancía de los ahorros, por lo que este siempre debe ir incrementando.

Dijo que el problema de la clase media y baja, es que no planean bien sus gastos o bien, que no priorizan aquello que es verdaderamente importante necesario.

“El problema está con el hecho de que no tenemos ese hábito, esa cultura y es necesario desarrollarla, es algo básico que necesitamos, del próximo cheque me compro un cochinito el 10% va directo al ahorro y no lo voy a tocar”.

En México, los trabajadores tienen el derecho a recibir un aguinaldo, lo cual al menos representa lo equivalente a 15 días de su salario.

En caso de que un empleado no tenga un año de antigüedad laborando, tiene derecho a recibir la parte proporcional al tiempo laborado, de acuerdo a la Ley Federal del Trabajo.

Esta obliga a los patrones a que el aguinaldo se pague a más tardar el 20 de diciembre. Si no se recibe en esa fecha, el trabajador puede demandar para que se le cumple su pago.