Personal de la Secretaría de Marina dio aviso a Protección Civil Sonora del rescate de dos pescadores que abordaron la embarcación “María de los Ángeles”, misma que zarpó el pasado 5 de enero de las costas del Golfo de Santa Clara.
Se reportó que las personas fueron encontradas con vida y ya están siendo valoradas por la Cruz Roja; su vehículo, que al parecer sufrió una avería, fue remolcado al puerto de San Felipe, California.
De acuerdo con fuente extraoficiales, desde el día 5 de enero se extraviaron, y por ello, la Capitanía de Puerto emitió un comunicado acerca del extravío de estas personas.
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La dependencia federal pidió a la población que, si saben de algo que ayudara a localizar la embarcación, se los hiciera saber.
La matrícula de la panga extraviada cuenta con el número 26011455138 y sólo se reportaron dos tripulantes en la misma.
Según la Capitanía de Puerto, ambos pescadores fueron encontrados con vida y se encuentran bien de salud, aunque permanecen en San Felipe, debido a que fueron llevados hacia ese sitio, debido a que el vehículo quedó varado en las cercanías de ese puerto.
Mal tiempo
Uno de los problemas a los que se enfrentan los pescadores es el mal tiempo, puesto que las condiciones para navegar no son las óptimas y pueden ocasionar problemas serios si se presentan vientos fuertes o lluvias.
La Capitanía de Puerto ha emitido comunicados acerca de las difíciles condiciones climatológicas del poblado, alertando a quienes se aventuren al mar que tengan cuidado y recomendaron no salir a pescar.
Por lo pronto, solamente la gente se ha acercado a la orilla de la playa, pero no se mete al mar, porque se encuentra “picado”, es decir, agitado, esto, cuando hay problemas de fuertes vientos en el poblado.
En las mareas, el problema es que se han soltado rachas de aire, que agitan el mar, poniendo en peligro a los pescadores, aunque, en las más recientes no ha sido así.
En varias ocasiones, se han llegado a presentar vientos con intensidad de hasta 29 kilómetros por hora, pero rachas de hasta 41 kilómetros por hora, lo que pone en riesgo la seguridad de las pangas que salen en busca del camarón.
Las olas que se han presentado últimamente, son de dos a cuatro pies (un metro), pero se ha mantenido despejado el cielo, por lo que no hay posibilidades de precipitaciones, por lo pronto, aunque se habla de que este fin de semana habría lluvias.