La Unión de Albergues de Mexicali pedirá apoyo a los tres niveles de gobierno para atender y prevenir un aumento en las deportaciones debido a las nuevas políticas migratorias de Estados Unidos, reveló Altagracia Tamayo, directora de Cobina A.C. y propietaria del albergue La Posada del Migrante.
El pasado 4 de junio el presidente de Estados Unidos, Joe Biden, firmó un decreto en el que suspendió temporalmente la entrada de migrantes que cruzan ilegalmente la frontera sur de su país.
Blas Nuñez-Neto, subsecretario de Política Fronteriza e Inmigración del vecino país, comentó que con esta medida las personas que crucen ilegalmente no serán elegibles para asilo y se acelerarán los trámites de repatriación, o deportación.
Al respecto, Altagracia Tamayo mencionó que la Unión de Albergues de Mexicali analizará las necesidades de los albergues y la magnitud de las deportaciones que se realizarán para pedir apoyo a los gobiernos municipal, estatal y federal.
“Queremos hacer un programa para ver, como asociaciones civiles, que servicios deben de tener los gobiernos, en apoyo a nosotros (...), ahorita, por el calor, nosotros sabemos que Mexicali va estar medio calmado, pero si se tiene que hacer”, expresó.
En ese sentido, aseveró que recientemente dejó de operar la Comisión Mexicana de Ayuda a Refugiados (Comar), por lo que es necesario que las asociaciones civiles locales realicen las asistencias a los migrantes, pero con apoyo gubernamental.
Además, hizo un llamado a los migrantes que aún están en las ciudades fronterizas esperando cruzar a tener paciencia, no desesperarse, y seguir esperando a culminar un trámite legal de solicitud de asilo.
Por su parte, David Pérez Tejada, delegado del Instituto Nacional de Migración en Baja California, mencionó que durante la primera semana en que se implementaron las nuevas políticas migratorias de Estados Unidos se han deportado 40 migrantes por Baja California, cifra que hasta el momento está dentro del promedio.
