Tijuana.- La señora Margarita tiene dos niños, de dos y ocho años, “el mayor está gordito, desde chiquito comía más que los otros niños y pensaba pues está sano porque estaba más grande que otros niños”. Pero al llevarlo a un centro de salud para aplicarle una vacuna a principios de este año, el médico le dijo que tenía sobrepeso y era propenso a tener enfermedades como diabetes, el niño tenía que bajar de peso, por lo que le recomendado comer sano y realizar actividad física.

Para Margarita preparar alimentos sanos para su familia no está a su alcance económico, con la pandemia el trabajo escasea y su economía es difícil, dice que comprar alimentos sanos es caro.

“La doctora me dijo que no puedo combinar el arroz y frijoles en una comida, que solo comemos una tortilla, pero la verdad eso comemos todos los días, pues no se van a llenar”.

Hacer ejercicio es difícil, viven en una pequeña casa de interés social en la privada Del Río de la colonia Hacienda Las Fuentes, por la zona insegura no le permiten salir a los niños a las calles o al parque a jugar.

“No pueden jugar en la calle porque la privada vivimos todos pegados, sí juegan futbol pueden quebrar un vidrio y andar en el parque es peligroso, y ahora la escuela es en la casa, pues se la pasan encerrados”.

El hijo de la señora Margarita se suma a las estadísticas de sobrepeso y obesidad en la población infantil de Baja California y es que tres de cada 10 niños tienen problemas de sobrepeso u obesidad en el estado, de acuerdo con la Encuesta Nacional de Salud y Nutrición (Ensanut); los dos problemas de salud que persisten entre los niños en el estado son en primer lugar el sobrepeso, cuando el Índice de Masa Corporal (IMC, que resulta de dividir el peso entre la estatura) es superior a 25, y el segundo es la obesidad, cuando el IMC es superior a 30.

Según la Ensanut, Baja California se posiciona como segundo lugar en niños con edades de cinco a 11 años con sobrepeso en el país.

Además el estado se encuentra en el lugar número 11 del país en obesidad infantil entre niños de cinco a 11 años con el registro del 17.3%.

De acuerdo con la Ensanut, los niños con peso alto son más propensos a adquirir enfermedades como diabetes, hipertensión, colesterol y enfermedades que se desarrollan con la obesidad.

Las condiciones de confinamiento derivado de la pandemia y las clases virtuales han recrudecido la obesidad infantil, un problema que ya se tenía detectado en Baja California, así lo explica el pediatra Alberto Uribe Valle, ex presidente del Colegio de Médicos Pediatras.

“Estamos haciendo más agudo, es un problema que ya teníamos, aquí la situación es que de por sí somos el número uno en obesidad infantil, aquí el problema es que los niños estando en esos espacios reducidos, la facilidad que tienen al acceso de estar comiendo y por lo regular lo que tenemos en casa no siempre está catalogado como saludable”, dijo Alberto Uribe.

Estima que el número de niños con problemas de peso u obesidad se incrementó entre un 10% y 20% con relación a los que existían el año pasado, aunque no es posible conocer con certeza la cantidad de niños con sobrepeso, pues no hay la llamada consulta del “Niño Sano” con la pandemia, consultas que se han convertido en virtuales.

El experto en cuidado médico infantil dijo que no es posible dimensionar el problema que provocó la falta de actividad física y la facilidad para comer derivado de la pandemia entre la población infantil.

En el área de consultas privadas, Alberto Uribe indicó que se han presentado casos de niños con ataques de ansiedad, episodios de asma y alergias originados por problemas de peso y el confinamiento.

Mientras que el médico responsable de afecciones cardiometabólicas de la Jurisdicción de Salud, Julián De Loera, dice que es una realidad que las personas en general, que incluye niños, han estado regresando a las unidades de salud pública con unos kilos de más, derivado la inactividad por confinamiento obligado de la pandemia.

“Es importante establecer una rutina con los pequeños en casa, donde los padres obviamente se involucren y donde no los tengan pegados a un televisor, a un celular, a una tablet, porque lo único que provocamos es que quieran comer y estén subiendo de peso”, dijo el médico De Loera.

Explica que en promedio la población ha incrementado hasta dos kilos de peso y esto se debe a que el permanecer en casa impulsa a la población a comer más de lo habitual, principalmente carbohidratos y otros alimentos altos en calorías.

El médico De Loera recordó que la obesidad, tanto en niños como adultos, es la madre de las patologías crónicas de las enfermedades como diabetes, hipertensión, problemas de corazón, colesterol y problemas cardiovasculares.

Según la Encuesta Nacional de Salud y Nutrición, el panorama del sobrepeso, obesidad y diabetes que se explica por el fenómeno de obesidad en las familias, afecta a los niños, es multifactorial: El bajo costo de alimentos procesados, adicionados con altas cantidades de grasas, azúcares y sal. El aumento del consumo de comida rápida y comida preparada fuera de casa para un sector creciente de la población. La forma importante de la exposición de publicidad sobre alimentos industrializados y de productos que facilitan en los niños. La disminución de forma importante de la actividad física de la población infantil por cambios de actividades, como el uso de tecnologías de celulares y videojuegos. Expertos coincidieron que se debe de cuidar el peso de los niños en Baja California, pues si no se pone atención en el sobrepeso infantil, será a futuro una generación con enfermedades derivadas de la obesidad.