El padrón estatal apunta 1 mil 956 personas con espectro autista que han sido atendidas en el Instinto de Psiquiatría de Baja California (IPBC), de las cuales 643 personas han sido en Mexicali, manifestó Pamela Valtierra, nutrióloga del Hospital General de Mexicali (HGM).
En el simposio para el abordaje inclusivo para personas con autismo a nivel hospitalario mencionó que dichos datos son de enero a mayo del 2024 en donde además se han consultado externamente a 617 personas y han tenido 26 hospitalizaciones.
La especialista explicó que el espectro autista es una condición en la que el ser humano se desarrolla de una manera distinta a nivel cerebral, con una diversidad en ese neurodesarrollo que se traduce en problemas de aprendizaje, comunicación social o en el manejo de emociones.
Indicó que hay tres niveles de acuerdo a las nuevas clasificaciones; el primer nivel en donde necesitan poca ayuda, en el segundo nivel se intensifica la dependencia externa y en el tercer nivel ya no se pueden manejar por sí mismos, siendo dependientes totales de otra persona.
“Es un problema en el neurodesarrollo que se puede manifestar principalmente en la actividad social y emocional, sin embargo, con un buen tratamiento oportuno y si no es un grado grave del autismo pueden lograr ser totalmente independientes”, aclaró.
DETECCIÓN TEMPRANA
La nutricionista, platicó que la detección temprana es la clave para llevar a cabo un buen tratamiento, por lo que los padres siempre tienen que estar atentos a cualquier anomalía que se pueda presentar desde los primeros 12 meses de vida del infante.
Informó que los primeros síntomas que se presentan es que el niño no tenga las conductas de acuerdo al desarrollo humano de su edad, por ejemplo, que no pueda sostener su cabeza o no se pueda sentar, así como que no responda por su nombre.
“Más que nada es ver cómo se va desenvolviendo, si es apartado, si el niño no habla, necesitamos hacer una intervención temprana para descartar un trastorno en el espectro autista o un retraso en el desarrollo”.
CAUSAS
Pamela Valtierra, comentó que dentro de las causas de este trastorno se encuentran cuestiones ambientales, genéticas así como el medio del desarrollo, como en la pandemia que no había socialización por lo que se ha desarrollado en mayor medida el espectro.
Detalló que durante el embarazo no hay ningún criterio de valoración para detectar alguna anomalía, es una vez que nace conforme a su comportamiento social, ya que puede llevar un desarrollo adecuado y de pronto haber un retroceso.
“En este simposio estuvimos capacitando a todo el personal de salud, que abramos los ojos de cómo está aumentando de una forma tan acelerada y como padres de familia que podamos hacer la intervención pronta, buscar y si vemos un foco rojo verlo con diferentes opiniones de expertos”, concluyó.