A 50 días de iniciar operaciones la garita Río Nuevo, las instalaciones administrativas continúan vacías, prácticamente sin operar, solo se cuenta con un módulo del Servicio de Administración Tributaria, para quienes tengan “algo que declarar” en cuestión de importaciones.
El edificio blanco de dos pisos, al centro de la construcción del nuevo puerto fronterizo, aún está en su parte superior con los muebles sin estrenar y en la parte baja, sólo hay un aparato de rayos x para quienes les revisan sus pertenencias al viajar en camión.
El 10 de julio empezó a funcionar a marchas forzadas el puerto fronterizo Río Nuevo, de Norte a Sur, para poder cumplir con las condiciones de las autoridades administrativas de Estados Unidos.
LA VOZ DE LA FRONTERA
Realizó varios recorridos y detectó que a pesar que se trata de un puerto de ingreso a México, el módulo del Instituto Nacional de Inmigración (Inami), al parecer se instaló, pero no funciona.
El viernes pasado, cuando llegaron decenas de cazadores procedentes de Estados Unidos, ante el inicio de la temporada cinegética, nadie verificaba su entrada legal al país.
Esto, a pesar de que una de las funciones del Inami es la regulación de los flujos de migración y facilitar el ingreso y los tiempos de resolución de los trámites migratorios.
OFICINA “AVIADORA”
Llama la atención que hasta las cintas que se utilizan para separar las filas, pertenecieron a una aerolínea, pues tienen los logotipos de la empresa, no del Inami.
Quienes lleguen al país y deseen hacer sus trámites correspondientes pueden hacerlo saliendo en su vehículo por Río Nuevo, hasta callejón Zorrilla, en las instalaciones del instituto.