La coordinadora de la Junta de Coordinación Política (Jucopo) de la XXIII Legislatura del Estado, Montserrat Caballero Ramírez, aclaró que la nueva licencia sanitaria no tiene fines recaudatorios e hizo un llamado a los empresarios a no malinterpretar las propuestas.
El sector restaurantero del estado, manifestó su desacuerdo en la nueva licencia sanitaria que se aprobó en la sesión del 1 de mayo, por la actual legislatura estatal, en la que se establecen cobros que consideran muy elevados ante la pandemia del Covid-19, que lejos de beneficiarlos, los perjudicará económicamente.
Caballero Ramírez, hizo un llamado al sector empresarial a no interpretar erróneamente las propuestas legislativas en materia de salud.
Lo anterior, debido a que el único propósito de éstas es el de cuidar la salud de la ciudadanía y regular las actividades de todos aquellos o giros -no sólo restaurantes- que manejen productos perecederos, como almacenes de comida.
También establecimientos que deben tener un alto nivel de exigencia sanitaria como hospitales, clínicas, funerarias, rastros, albercas, baños públicos, hoteles, entre otras.
La también presidenta de la Comisión de Salud, explicó que existe una confusión en cuanto a esta iniciativa.
“No será un nuevo impuesto, ni será un documento recaudatorio; simplemente es la sustitución de la actual licencia sanitaria que otorga Coepris (Comisión Estatal para la Protección de Riesgos Sanitarios), ya que hemos detectado una serie de ambigüedades que propician un riesgo innecesario para la salud de los bajacalifornianos”.
“Los diputados de Morena y sus aliados, estamos conscientes de la urgente necesidad de instrumentar nuevas políticas públicas en materia de salud, por lo que habremos de insistir a los sectores empresariales, en poner la máxima atención para cuidar la salud de la población”.