Para que el transporte público pueda seguir funcionando se requiere un subsidio, ya que dar un incremento de golpe a las tarifas afectaría a los trabajadores, señaló el economista Enrique Rovirosa.
Actualmente el costo del boleto es de 13 pesos, mientras que los concesionarios piden aumentarlo hasta 23 pesos; consideró que el incremento de costos operativos de los transportistas es real, aunque no determinó un monto preciso de alza.
Aclaró que él está en contra de los subsidios, “a mí lo que me gustaría es que los trabajadores ganaran más para poder cubrir como debe ser el costo de transporte sin necesidad de que hubiera subsidios”.
Y que las autoridades han sido omisas en su responsabilidad de tomar decisiones y han dejado pasar el tiempo hasta que en este momento la situación se ha complicado más para usuarios y prestadores del servicio.
“Lamentablemente el hecho de que tenga este peso político ha evitado que se tomen las decisiones que se deben de tomar cuando es necesario revisar precios”.
Rovirosa comentó que al usuario cualquier incremento le afecta a su poder adquisitivo, porque el transporte tiene un peso importante dentro del gasto diario de las familias trabajadoras.
Además, que el transporte público de Mexicali cuenta con dos años que no se ha incrementado la tarifa, en condiciones en las que ha tenido una inflación crítica en cuanto a los insumos del sector, como son combustible y refacciones; sueldos de sus trabajadores, todo esto afecta la operatividad de los transportistas.