A pesar de que el sector empresarial en el País, exige que se salve a las empresas ante la crisis económica del Covid-19, no es posible aplicar medidas como Estados Unidos o Alemania, porque México no es un país rico, hace lo que puede con lo que se tiene.

Lo anterior lo manifestó el economista Enrique Rovirosa Miramontes, al referir las medidas de austeridad que ha aplicado el gobierno federal para afrontar la pandemia del Covid-19, de las que opina que son insuficientes pero adecuadas ante la crisis económica en la que ya nos encontramos inmerso.

López Obrador dio a conocer el pasado jueves, varias medidas para afrontar la crisis económica provocada por la pandemia mundial, publicada el jueves 23 de abril en el Diario Oficial de la Federación, como es el cerrar oficinas gubernamentales y suspender gasto de gobierno.

Aunque siguen en pie las obras como el Tren Maya, Refinería de Dos Bocas y el Aeropuerto de Santa Lucía, además de los programas de asistencia federales, sin que haya anunciado ningún plan de rescate a las Mipymes.

“México no es un país rico, no puede reaccionar de la misma manera a como está reaccionando Estados Unidos, Alemania, Italia, Japón, etcétera, porque no somos un país rico, y eso parece que se le olvida a mucha gente.

“Somos de hecho un país pobre, tanto en el número de personas que están en esa condición, 50 millones de mexicanos oficialmente están en la línea de pobreza, y podemos decir que hasta 30 millones más, es decir, 80 millones de personas están en la pobreza o muy cerca de la pobreza”.

Rovirosa Miramontes, comentó que la recaudación en México es la mitad o menos, de la que tienen los países mencionados, además dependemos de la inversión y de la tecnología extranjera, somos un país maquilador.

Es por ello que en esencia, el gobierno federal está haciendo lo que las circunstancias lo permiten, acorde a las circunstancias económica que tenemos, la respuesta de manera dosificada a la problemática que se va presentando, en los próximos meses o años, es lo mejor, no se puede echar toda la carne al asador.

“La crisis que viene y la que ya estamos, va a durar varios años, en el mejor de los casos, 3 o 4 años, y posiblemente represente una década perdida”.

Expuso que por la pobreza de la población, así como por la gubernamental, la única manera de resolver el problema es endeudando al país, sin embargo, el endeudamiento que existía aún antes de la pandemia ya era muy fuerte.

Es decir, el endeudamiento de México en 2019, correspondía al 47.4 % del Producto Interno Bruto (PIB), esto, sin contar con el endeudamiento de los estados y municipios.

Pero tenemos que con la devaluación del tipo de cambio a 24 pesos por dólar, más los apoyos que anunció el Banco de México, la proporción antes mencionada subiría hasta el 65 %, pero hay quienes calculan que a final del 2020 podría llegar a ser de hasta el 75 %.

En este caso, el gobierno federal no salvará a las empresas, como ya lo ha hecho en otras ocasiones, además no puede apoyarlas a todas porque no hay dinero que alcance, por ello muchas de estas desaparecerán.

Pero en esta ocasión está apoyando a los consumidores, a quienes por mucho tiempo no se les había ayudado, lo que también es muy importante para mover la economía, señaló Rovirosa Miramontes.