Hace dos años, por primera vez una enfermedad no contagiosa ameritó una declaratoria de emergencia o pandemia en México por parte de la Organización Mundial de la Salud (OMS).

Se trata de la diabetes mellitus, enfermedad que padecen actualmente 6 millones de mexicanos y entre ellos hay quienes no dimensionan la gravedad de ese diagnóstico. Juan Daniel Flores Helguera, responsable del programa de diabetes en la Jurisdicción de Servicios de Salud, detalló que a través de los Centros de Salud que funcionan en la ciudad, el valle y San Felipe se tienen detectados 5 mil 500 mexicalenses con diabetes y lo más grave es que el 36% de ellos no acuden al médico ni se apegan al tratamiento.

“Son muchas las complicaciones que día a día se ven en los centros de salud, la diabetes es la principal causa de amputación de extremidades, de ceguera y nefropatía diabética o fallas en el riñón que condicionan al paciente a una mala calidad de vida e incrementa el gasto en salud”. Agregó que los pacientes no acuden a las citas, no siguen el tratamiento y no monitorean sus niveles de glucosa.

“Hay mucha inasistencia de los pacientes, no son subsecuentes en sus citas porque pueden ir hoy y vuelven a consulta en otros tres meses, eso hace que pierdan la adherencia al tratamiento y que se descontrolen”.