Hija de un elemento de la Policía Municipal y segunda generación en contar con “Sangre Azul”, la agente Dianira Esther Martínez Valenzuela, dijo sentirse orgullosa de pertenecer a las filas de la Dirección de Seguridad Pública Municipal.
Con 17 años dentro de la Policía Municipal refirió que ella es el legado que su padre dejó a la corporación, donde a pesar de tener en ocasiones altibajos siempre es gratificante el contribuir con la sociedad.
“Es muy gratificante el poner el granito de arena más que nada en momentos de crisis, cuando ellos (sociedad) necesitan a nosotros, hablando de hombres y mujeres, para brindar apoyo”, comentó.
“Siento que nací para esto, si volviera a nacer volviera a ser policía, yo sé que está es mi vocación”, detalló el oficial Martínez.
El motivo que la orilló a ingresar a las filas de la DSPM fue para demostrar a su padre, y a ella misma, que era lo suficientemente capaz como cualquier otra mujer para desempeñarse en el trabajo que se ponga por delante.
“Aunque el camino ha sido difícil siempre tengo un motivo para seguir adelante, y seguir derribando las barreras que se me pongan”, enfatizó.
Actualmente la oficial pertenece a la estación de Lomas Altas, sin embargo, durante su carrera se ha desempeñado en diversos grupos de reacción, donde ha estado codo a codo con compañeros hombres.