Cientos de migrantes centroamericanos se concentraron en el Centro Histórico de la ciudad, partirían a las 2:00 de la mañana a Tijuana, ya sea a pie o en automóvil.
Desde las primeras horas de hoy domingo, cientos de migrantes centroamericanos abandonaron el albergue ubicado en Compuertas, conocido como el “castillo amarillo”, para dirigir sus pasos hacia el Oeste al albergue Alfa y Omega, donde ya no cabe nadie y que incluso, se habilitó un estacionamiento para que acampen las personas.
Walther Godoy, proveniente de Guatemala, mencionó que ha dejado su País, por los altos niveles de violencia que existe, ya que no les dejan más alternativas que unirse a las “maras” o pandillas, en las cuales pueden perder la vida.
Llegó al Centro Histórico de raite y en tramos a pie, arma la casa de campaña que le regalaron a su madre, y ya muestra cierta habilidad en construir la estructura que los protegerá del frío mexicalense, clima al que no están acostumbrados. Desconoce cómo se irán a Tijuana, si en camión o a pie, únicamente sabe que salen a las 2:00 de la mañana rumbo al Oeste.
En el improvisado campamento, trabaja una cuadrilla de la CESPM para arreglar la tubería y los migrantes puedan tener acceso a una llave de agua, debido al elevado gasto del líquido potable para consumo humano, en acciones como bañarse y lavar ropa.
También se presentó una acción poco común, la policía municipal fue llamada para detener a una mujer de origen hondureño, hicieron falta 3 oficiales entre ellos uno femenino para poder controlar a la mujer que mordió a la agente de la Dirección de Seguridad Pública Municipal.
La acusaron de robar los teléfonos celulares de sus compañeros de caravana y venderlos, se puso violenta cuando fue descubierta por una de sus víctimas, a la que golpeó, por lo que los encargados del albergue no dudaron en llamar a los uniformados.
Un representante de la Comisión Nacional de los Derechos Humanos presenció y grabó todo el proceso de la detención… no hubo acciones en contra de los policías, ya que el daño se los había hecho a los propios integrantes de la caravana.