Baja California está a pocos días de que se cumpla un año desde que se confirmara el primer caso positivo de Covid-19 en el estado. El miedo, la incertidumbre y el desconocimiento, eran los sentimientos que prevalecían por aquellas fechas.
Ahora el panorama luce algo diferente. El proceso de vacunación ya inició, la ocupación hospitalaria se encuentra en sus niveles más bajos y los casos activos se encuentran por debajo de los 500 en toda la entidad.
Tras 12 meses complejos para Baja California, la luz al final del túnel parece que se asuma, pero los riesgos están latentes, ante las aperturas de diversos giros económicos y fechas como las vacaciones de Semana Santa, el inicio de las campañas políticas, el Día del Niño y el Día de las Madres.
SEMÁFORO AMARILLO
Para la próxima semana Baja California ya estará en semáforo amarillo. Con esto, negocios como bares que permanecen cerrados desde inicios de diciembre, tendrán un aforo permitido de 50%. Lo mismo para salones nocturnos y jardines al aire libre.
Las reuniones sociales, podrán ser de máximo 20 personas, con la recomendación de la distancia social. Los restaurantes y hoteles tendrán un aforo de hasta 75%, mientras que los gimnasios podrán recibir al 65% de sus clientes.
¿Pero cuáles son los riesgos de estas aperturas? El presidente del Colegio Médico de Tijuana, Eric Rosenberg Díaz, destacó que actividades como antros y bares sí representan un peligro adicional, pero existe manera de que vuelvan de forma que presente menos riesgo.
“El problema es ese, las aglomeraciones, en lugares cerrados y donde no circula el aire, ese es el problema. Si se puede mantener el aforo limitado, probablemente será necesario el uso de mascarilla”, comentó.
Es precisamente el cubrebocas, gel antibacterial, lavado de manos y la distancia social, las principales herramientas que tendrá la sociedad para vivir una nueva normalidad, pues regresar a la vieja normalidad, aún tomará un tiempo, consideró Rosenberg Díaz.
“Estas medidas han demostrado que ayuda y funcionan, no protegen al 100%, pero es una gran diferencia, es algo que se debe continuar, seguir con esas medidas y limitar la gente en espacios cerrados. Tratar de que las actividades se realicen afuera, al aire libre, para disminuir el contagio y guardar la distancia. Esa ola de diciembre, tuvo que ver con las reuniones sociales, con Halloween y generó que a partir de todo noviembre y diciembre, aumentaran los casos”, comentó.
El presidente del Colegio Médico, dijo que un peligro latente para los próximos meses, serán las vacaciones de Semana Santa y la celebración del Día de las Madres, pues son fechas que normalmente congregan a un gran número de personas y acelera el ritmo de contagios.
“Le pedimos a la gente que tome conciencia y se tomen las medidas necesarias y habrá oportunidad para festejar, viajar e ir a la playa, en muchas otras ocasiones”, manifestó.
Aunque la vacunación ya inició, dijo que no ha vacunado ni al 5% de la población del estado, cuando se necesita por lo menos inmunizar al 60% para alcanzar la “inmunidad” de rebaño, algo que estimó no se alcance para el resto del año, de acuerdo al ritmo actual.
REGRESO A CLASES
El retorno a las aulas significa quizás el mayor reto para las autoridades estatales. La Secretaría de Salud advirtió que este regreso no sería sino hasta el próximo ciclo escolar, que arrancará en julio próximo.
No obstante, Eric Rosenberg Díaz, señaló que los alumnos tendrían que tomar medidas adicionales para volver a clases, porque las condiciones no serán nada similares a las que existían hasta marzo de 2020.
“Se necesita un sistema híbrido, algunos días algunos alumnos y otros en línea y otros otros días para que los salones no estén llenos, con 30% de alumnos en aulas, perfectamente separados, con las ventanas abiertas”, detalló.