Lo más difícil de emprender es atreverse

Gracias a la calidad que ha mantenido en sus productos y al buen servicio al cliente, el negocio “Fat Dog Chili Dogs” ya cumplió ocho años de existir

MARIELA TAPIA

  · sábado 10 de agosto de 2019

Al renovar el negocio, explicó que lo que buscó fue atraer a un mercado de jóvenes / JORGE GALINDO

Gracias a la calidad que ha mantenido en sus productos y al buen servicio al cliente, el negocio “Fat Dog Chili Dogs” ya cumplió ocho años de existir, pero sobre todo ha logrado sobrevivir a múltiples cambios fiscales y económicos que han pasado en México y el resto del mundo. Melissa Martínez, propietaria de dicho establecimiento, explicó que ella siempre supo que quería tener su propia empresa, lo cual ahora es una realidad que actualmente brinda además otros dos empleos directos.

Anteriormente ella junto a su familia había tenido negocios informales, pero hace cinco años se dio la oportunidad de aprovechar el traspaso de un local de hot dogs, proceso que en un principio sí le generó incertidumbre, sin embargo ahora es un negocio próspero en la búsqueda de alguna forma de expansión. De las cosas que antes consideró como errores y ahora como un aprendizaje fue que al emprender decidió inaugurar el comercio durante el verano, lo cual se le juntó con muchos otros gastos que se detonan por la temporada de calor, lo cual ahora tomará en cuenta al momento de volver a emprender un nuevo proyecto. “Da miedo dejar tu empleo formal, pero cuando ves que está funcionando, todo vale la pena”.

Otro de los aprendizajes que tuvo, fue que iniciar un negocio se debe elegir muy bien al personal, toda vez que al haber sido un traspaso, esto ocurrió junto a los empleados que antes tenía el establecimiento. En dicho proceso, al cambiar su ventaja competitiva e incluso el horario del negocio, esto no compaginó con los empleados de antes, por lo que tuvo que buscar sí tuvieran la misma ideología de los nuevos “Fat Dog Chili Dogs”. Lo característico de los “Fat Dog Chili Dogs, es su estilo Calexico, siendo que busca rememorar el sabor de los “perros calientes” que se pueden adquirir en la calle Segunda de la hermana ciudad, toda vez que los clientes lo que buscan es ese sabor nostálgico y de tradición.

Al renovar el negocio, explicó que lo que buscó fue atraer a un mercado de jóvenes. Aunque tenía muchos clientes mayores, ahora lo que pasa es “los nietos” son los que consumen ahora los hots dogs con la novia. En el transcurso de los años, Melissa puntualizó que la prioridad siempre ha sido mantener la calidad en los ingredientes que utilizan, pese a los cambios tan drásticos que ha sufrido el peso contra el dólar, ya que solo adquieren productos americanos, con el fin de mantener la experiencia nostálgica de los hot dogs estilo Calexico.

“Nosotros sabemos que estamos ofreciendo calidad en nuestro hot dog, yo pienso que por eso la gente al pasar tantos años, ha seguido viniendo y nos hemos mantenido; si cambiamos un ingrediente, la gente lo

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