El precandidato a la gubernatura del estado por Movimiento Ciudadano, Alejandro Mungaray Lagarda, consideró que las elecciones en Baja California se han convertido en un cochinero, en la que se privilegia la descalificación sobre las propuestas.
En entrevista con Aldo Pérez Angulo, director de LA VOZ DE LA FRONTERA y conductor del programa radiofónico, La Voz en la Radio, el ex rector de la UABC y ex secretario de Desarrollo Económico del estado, en la administración de José Guadalupe Osuna Millán, destacó que si sacó adelante a una universidad, así como a la economía estatal, claro que puede hacerlo con un estado.
“Voy a hacer una campaña decente, tratar bien a los que compiten, debe ser parte, porque las contiendas políticas se han convertido en un cochinero, ya todo mundo está esperando que le saquen trapos al sol inexistentes, pasan las campañas y no apareció nada, se vuelve infame el ambiente.
“Y el ambiente de deterioro o infamia, inhibe mucho la participación ciudadana y nadie quiere entrar, si vives la vida en paz y decentemente, a que te quemen, a que te lastimen, a que hablen mal de ti sin ningún fundamento”.
El cambio
Mungaray Lagarda mencionó que cuando se dan los cambios políticos en cualquier país y estos se dan por el hartazgo, por la desesperación, tienen un componente nuevo que merece ser reflexionado, y es que la gente quiere resultados a mucho más corto plazo, no tienen la misma paciencia.
El ajuste gubernamental del gasto, la crisis mundial a la que se enfrentó al principio de su administración la Cuarta Transformación, así como la pandemia por el Covid-19, han profundizado mucho la desigualdad económica y social que debían de resolverse con el cambio político.
Y es que hemos llegado a una situación tal en la que si sales a la calle, te puedes morir, pero si no lo haces, pues también, por lo que esa falta de acción para generar respuestas, está generando una actitud social diferente, expuso el pre candidato a la gubernatura de Baja California.
“La falta de resolución a muchos temas del bienestar, le abre la oportunidad al cambio político nuevamente”.
Economía
Mencionó que no ve como buena opción el regresar al pasado, pero tampoco el clientelismo que se está dando en la actualidad, ya que no se requiere una economía ni sociedad de privilegios, ni economía, ni sociedad clientelar, que los que apoyen a unos, sean los que reciben, y los que no, queden fuera.
“Lo que necesitamos es una economía y una sociedad de oportunidades, como lo que era Baja California, los que vivimos en Baja California, sabemos y oíamos cuando llegábamos, que si trabajábamos y estudiábamos, y no nos metíamos en problemas, podíamos prosperar”.
Es decir, en Baja California podías mejorar de casa, barrio, de carro, cosas que jamás tenías en otra parte del país, donde tenían una economía muy cerrada.
Las pandemias
Señaló que actualmente no solo la pandemia del Covid-19 ha golpeado al país, sino que hay otras, como es la de la falta confianza, y ejemplificó que cuando las personas se casan para ser amados y respetados, pero si las cosas no pasan como uno piensa, se desilusiona.
“La pandemia detonó una crisis más fuerte de la que estábamos resolviendo, en materia de desigualdad y ha hecho mucho más desigual el ambiente, de hecho, los últimos datos del INEGI revelan que pasamos de un 56 % de informalidad en la economía mexicana, a un 63 %”.
Es decir, con todo el cambio económico, político y social, estamos teniendo un impacto no deseado muy amplio, y esto pone a la gente contra la pared, ya que hay una pandemia económica muy fuerte, ya que para volver a la senda de crecimiento del 2019, que fue de 0 %, significa que tendremos 2 o 3 años muy complicados.
También existe una pandemia de la discriminación, ya que la impunidad y corrupción producto del privilegio, discrimina al resto de la gente limitando oportunidades, el clientelismo a través de padrones, también discrimina a los demás.