La jornada de violencia en Baja California en la que fueron siniestrados 24 vehículos, no se trató de terrorismo, fue solamente un acto propagandístico para tratar de desprestigiar el trabajo del presidente de la República, no se trató de un enfrentamiento de cárteles, señaló el delegado del gobierno federal, Jesús Alejandro Ruiz Uribe.
Expuso que las cifras delictivas en Baja California se están abatiendo, por lo que los hechos de aquella ocasión no corresponden con la realidad que vive el estado, son gente de fuera.
Las acciones que se dieron en diversos estados de la República, solo buscaban desviar la atención de las corporaciones, y que buscaban desestabilizar al gobierno del presidente Andrés Manuel López Obrador, y dar la impresión de que el gobierno ha perdido el control de la seguridad.
Con respecto a las declaraciones del senador Jaime Bonilla, que en tribuna acusó al gobierno estatal actual de no haber cumplido los acuerdos con el crimen organizado, dijo que él, como el presidente de la República, le tiene mucho aprecio y respeto por ser uno de los iniciadores del movimiento.
Sin embargo, cree que el ex gobernador y hoy senador se ha equivocado garrafalmente al hacer estas aseveraciones que se basaron en el mensaje que le dejaron en una narcomanta, expuso el funcionario federal.
Sobre la marcha del sábado que está siendo convocada en contra de la inseguridad, Ruiz Uribe comentó que celebra que la sociedad civil se levante de sus sillones y se manifieste, ya que eso habla de que hay una sociedad viva.
Sin embargo, hay marchas que no son legítimas y que tienen un trasfondo político, solo habrá que ver si esta no es una de esas, aseveró el delegado del gobierno federal en Baja California.
Sobre el avance en el programa de regularización de vehículos “chocolate”, Ruiz Uribe expuso que hasta la mañana de ayer se habían contabilizado 82 mil 031, que dan un total de 205 millones, 077 mil 500 pesos, que se destinarán a bacheo.
Informó que en Ensenada se han regularizado 10 mil 943 vehículos, en Mexicali 26 mil 998, en Playas de Rosarito 3 mil 274, San Felipe 2 mil 396, San Quintín 3 mil 354, Tecate 2 mil 476, y en Tijuana 32 mil 590.
